Antonio Periñán, del bar “El Golpeao, se nos ha ido a los 82 años
Hoy martes será enterrado en el cementerio de San Juan Bautista, tras la misa en el Mancomunado a las 11,30 horas.-
Ayer
falleció en Puerto Real a los 82 años Antonio
Periñán Busto, conocido por todos como el de El Golpeao, bar que regentó durante más de sesenta años hasta su
jubilación. Hombre amable y servicial donde los haya, hizo famoso este pequeño
rincón gastronómico con las delicias que preparaba su esposa Carmen Caldero. A las 11,30 horas será la misa
en el Cementerio Mancomunado de la Bahía, trasladando sus restos posteriormente
al cementerio de San Juan Bautista, donde recibirá cristiana sepultura. (Fotos cedidas por Paco Montiel y Fotos de Chiclana)
Antonio
Periñán era muy querido por los chiclaneros, de toda edad y condición. Atendía siempre con una amplia sonrisa. Su bar
fue visitado a lo largo de seis décadas por varias generaciones, que no
quisieron perderse los guisos que su esposa hacía primorosamente. Las alitas de
pollo, la sangre en tomate y los caracoles fueron sus especialidades, aunque
cualquier plato que preparara su esposa era bocato
di cardinale.
Muchos
veranos abrió una terraza al lado del bar, que se llenaba cada noche y donde
era muy difícil encontrar mesa, aunque muchos preferían esperar lo que hiciera
falta con tal de degustar sus tapas y raciones. Les ayudaban sus hijos y cuando
éstos ya no pudieron echarles una mano por sus ocupaciones, dicha terraza se
cerró.
Los
carnavaleros también han disfrutado lo suyo en El
Golpeao. La chirigota de Argüez
ensayaba en un local abandonado (una antigua pieza de bodega que adquirió Antonio) frente al bar y era el lugar de encuentro de
sus componentes. El ensayo general poco antes de Carnaval congregaba a muchas
personas, que pasaban por dicho establecimiento a degustar sus alitas de pollo. Pero antes de esta chirigota estuvo ensayando Tiroleses, de José Luis Bustelo. Fue en 1980 y le seguirían otras agrupaciones que salieron en los años siguientes.
ALITAS DE
POLLO
Por esa
época TAETRO tenía el local a escasos
metros del bar en la calle Gravina, y allí era donde íbamos a por la bebida o
comida. Las alitas de pollo más ricas que he probado en Chiclana eran las de El Golpeao.
En 2007
fue elegido rey mago, encarnando a Melchor. Tenía entonces 71 años. Le
acompañaron Bartolomé Chaves, de Barmeagua, y Juan
Luis Fuente Forero, que era presidente del Consejo Local de Hermandades
y Cofradías.
Hace
cuatro o cinco años cerró sus puertas definitivamente, ya que sus hijos no
quisieron continuar con el bar. Le dolió echar el cerrojo a lo que ocupó casi
toda su vida, pero tenía derecho a disfrutar de lo que le quedaba y fue lo que
hizo a partir de entonces. Como recuerda Paco
Montiel, la esquina de Gravina y Bodega, tenía mucha historia: “Era el
paradero de medio Chiclana, un bar con mucha solera”.
Cuenta
Montiel que “Antonio comenzó a trabajar en un
bar con diez años, dedicando toda su vida a atender a su clientela, de todos
los gremios. Antes de amanecer abría sus puertas para que tomasen su copita de
coñac y un buen café”.
EL REAL
MADRID Y LAS NOCHES EN EL CASTILLO
Un lugar,
que se conservó igual que en sus inicios. Unas paredes cubiertas de antiguo
material de pizarra a media altura y un frigorífico de los primitivos. Un día
el dueño de la finca le dijo que se la vendía: “Tú
te quedas con el bar y toda la finca y me la vas pagando poquito a poco”.
Antonio
aceptó, pero eran tantas las letras que tenían que conformar, que no las
encontraba en ningún estanco. Tuvo que buscarlas por La Isla, donde recorrió
todos los estancos, logrando su objetivo.
Era un
enamorado del Real Madrid y durante muchos años con un grupo de amigos pasaba
una noche en el castillo de Sancti Petri, cuando éste estaba abandonado, donde
pescaban, jugaban a las cartas, comían, bebían, contaban chistes y disfrutaban
de una noche única. Eso sí, después dejaban el recinto limpio, dando un ejemplo
de urbanidad. En las paredes de El Golpeao
había numerosas fotos de cada expedición.
Se nos ha
ido un hombre bueno, que gozaba de la amistad de todos los que le trataron en su
pequeño bar, santo y seña de un pueblo que poco a poco ha ido perdiendo su
identidad. Y bares como El Golpeao
conformaban esa identidad.
Desde PUENTE CHICO damos nuestro más sentido pésame a
la familia y recordamos que el entierro será hoy martes en el cementerio de San
Juan Bautista, pasadas las 12,00 horas. Que descanse en paz.
Ya van que dando menos chiclanero nativo y mas adoptivo D.E.P
ResponderEliminarHan sido muchas cosas las que he aprendido y conocido junto a él. Cada día -como estudioso que soy de todo lo que acontece en mi pueblo- le preguntaba por algo. Precisamente, mi padre que era su amigo y el bar era una de sus obligadas paraditas, fue el que acompañó a nuestro querido Antonio a los estancos de San Fernando para buscar aquellas letras de cambio que con tanta ilusión hizo frente a sus debidos pagos para conseguir su bar y toda la finca. D.E.P.
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