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El Club Náutico Sancti Petri muestra su “absoluto rechazo al establecimiento de la reserva pesquera”


 

Alegará a la consulta pública del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación sobre declarar reserva marina entre el poblado y el Cabo de Trafalgar.-

La junta directiva del Club Náutico Sancti Petri aprobó por unanimidad, presentar una alegación a la consulta pública previa a la tramitación de la orden por la que se establece una reserva marina entre el cabo de Trafalgar y Sancti Petri.

 

Afirma que el Club está directamente afectado por dicho proyecto, como se puede leer en el único documento que se aporta por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación en su página web. La citada reserva marina “afectaría en toda su extensión a nuestros socios y, consecuentemente, a nuestra actividad y de manera subsecuente a nuestra viabilidad, así como al desarrollo de actividades de ocio y atractivo turístico del municipio de Chiclana”.

 

La documentación e información dada a conocer por el Ministerio “resulta manifiestamente insuficiente, pues no se aportan los datos y motivos que animan a la conveniencia de la creación de la zona de reserva pesquera, ni las pretendidas medidas a establecer”.

 

El club se fundó en 1973 y tiene más de 600 socios, con una flota gestionada de más de 200 embarcaciones, “siendo una de las organizaciones sin ánimo de lucro con más usuarios de pesca recreativa y deportiva, de las que se verían directamente afectadas por dicha reserva”.

 

REPERCUSIÓN ECONÓMICA

 

El Náutico mantiene convenio para la gestión de la lámina de agua con la Agencia Pública de Puertos de Andalucía y tiene en nómina a diez trabajadores que dependen directamente del Club.


En consecuencia, la reserva marina, en función de las características que se aprueben, “puede tener una decisiva repercusión económica en el Club y en la zona, en la que desarrolla actividades de pesca deportiva y recreativa que contribuyen de forma importante a la oferta turística”.

 

En atención al artículo 26.6 de la Ley 50/1997, siendo el Club una asociación que agrupa y representa a personas que verán afectados de manera directa sus derechos e intereses legítimos, es por lo que el Club “deberá ser reconocido como interesado a los efectos de que se le recabe directamente su opinión, una vez se hayan dado a conocer los antecedentes, datos, estudios e informes”.

 

Afirma así mismo que “queremos mostrarles nuestro total desacuerdo con la forma de iniciar la gestión de la reserva marina, al no haberse facilitado información alguna que contrastar”. En todo caso, “en tanto no se dé a conocer la información, manifestamos nuestro  total desacuerdo con el establecimiento de la reserva marina, salvo que no afecte, en modo alguno, a la práctica de la pesca deportiva y recreativa, bien por sus socios, usuarios o en los concursos que organicemos”.

 

MÍNIMA  INFORMACIÓN DEL MINISTERIO

 

En cuanto al objeto de la consulta pública, conforme al artículo 26.1 de la Ley 50/1997, señalan que habiéndose sometido a consulta pública previa a la tramitación de la orden, por la que se establece una reserva marina de interés pesquero en Conil, y se define su delimitación, zonas y usos, el Club Náutico Sancti-Petri, formula diversas consideraciones.

 

Los problemas que se pretenden solucionar con la nueva norma. El documento sometido a consulta “no aporta dato alguno de la existencia de sobrepesca en la zona, ni, en su caso, el posible origen de ello, que no sería consecuencia de la pesca deportiva o recreativa, que, por las artes de pesca que utiliza, las limitaciones legales de capturas y el número de usuarios que lo practica, es absolutamente insignificante comparado con la pesca profesional”.

 

No se informa en el documento sometido a consulta “sobre cuál sea la supuesta demanda social, ni quién la promueve, ni qué se pretende, ni a quién afecta”. En todo caso, esa “demanda social” no está constituida por los usuarios deportivos y recreativos.

 

Respecto a la  necesidad y oportunidad de su aprobación, dado que los datos, informes y medidas pretendidas no se han hecho públicos, “no es posible pronunciarse sobre la necesidad y oportunidad. Lo que sí está claro es que no deberá afectar en modo alguno a la pesca deportiva y recreativa”.

 

PESCA DEPORTIVA Y DE RECREO

 

En cuanto a los objetivos de la norma, no consta en la información publicada, “que la conservación y regeneración de los recursos pesqueros y de los hábitats y especies que contienen, se encuentren en peligro, luego no hay necesidad de garantizarlo”. En todo caso, la pesca deportiva y recreativa, por su número, sus limitaciones de capturas y las artes que utiliza, “se realiza con criterios de sostenibilidad y responsabilidad sin necesidad de la creación de la reserva marina”.

 

Las posibles soluciones alternativas regulatorias y no regulatorias, conforme a lo expuesto, sin perjuicio de la documentación, datos e información pendientes de dar a conocer, “no es necesaria ninguna regulación respecto de la pesca deportiva y de recreo. Este Club se reserva el derecho a formular opinión una vez se le haya dado a conocer la información que haya tenido en cuenta el Ministerio para la apertura de esta consulta pública”.

 

En conclusión, el Club Náutico Sancti Petri muestra su “absoluto rechazo al establecimiento de la reserva pesquera sometida a consulta pública, por los motivos expuestos, en tanto que pueda afectar a la pesca deportiva y recreativa que desarrollamos”.

 

2 comentarios:

  1. !DE PENA!. Precisamente, los colectivos interesados en acotar toda esa zona, son los que menos la protegen, con sus métodos de pesca y extracciones, son los que destruyen todo ese ecosistema marino, con tramos de redes que quedan en el fondo a perpetuidad, rastreo en cualquier zona , hasta a menos de 200 mts de la costa, con extracción y destrucción de inmaduros de todas las especies, tirando al mar, cajas y cajas del producto de la pesca para que no baje de precio esos productos en lonja. El pescador deportivo, es sin duda mucho más cuidadoso con todo el entorno marino y mantiene en todo su entorno cientos de puestos de trabajos en cada pequeña localidad marina. Haganselo ver, a estos que piden dicho acotamiento, y que el SEPRONA vaya a plazas y mercados y detecte la procedencia de inmaduros (salmonetes, etc, etc) y sancionen a los extractores y abastecedores de todo tipo de productos inmaduros. En cuanto a los solicitantes, que VIVAN, RESPETEN, Y DEJEN VIVIR.

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  2. Como lo llamarían los profesionales de la pesca, si cuatro mamarrachos, quisieran coger una zona del mar que es de todos, y hacer una supuesta reserva marina, solo para la pesca recreativa, eso se llama coto de pesca. Ya hay muchas leyes para que la pesca se haga ordenada, sea profesional o recreativa, dejemos a las personas disfrutar cumpliendo las normas y el que no las cumplas que sea sancionado o retirado de la pesca. Como se hace con las normas de tráfico.

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