La nueva planta de transferencia supondrá una inversión de casi tres millones de euros
El alcalde
de Chiclana y el primer teniendo de alcalde de Conil presentaron el proyecto,
cuyas obras podrían empezar antes de que finalice el año.-
El alcalde
de Chiclana, José María Román; el primer
teniente de alcalde de Conil, Antonio Alba;
los delegados de Medio Ambiente de ambos ayuntamientos, Joaquín Guerrero Bey y Manuel
Vicente Alba, y el gerente de Chiclana Natural, Rafael Gallo, presentaron el proyecto de la nueva planta de
transferencia para residuos sólidos urbanos (RSU), que dará servicio a ambos
municipios, liberando así a la estación de transferencia de Vejer, que se
encuentra sobresaturada.
Este
espacio y su carácter supramunicipal tiene también sentido en la eventual
atención que se le puede prestar a poblaciones como Vejer, Barbate, San
Fernando y Cádiz en caso de averías o paradas técnicas de sus propias
estaciones. Este proyecto supondrá una inversión de 2.989.934,61 euros, el
plazo de ejecución de las obras será de diez meses y la capacidad de la planta
será de 100.000 toneladas al año.
El regidor
local señaló que “se trata de un proyecto
desarrollado por la Junta de Andalucía, en un acuerdo de inicio de expediente
del 13 de diciembre de 2018. Llevamos tiempo trabajando en esta iniciativa para
la gestión de residuos, porque se abaratarán costes y porque nos permitirá dar
un salto de calidad importante en dicha gestión”.
Reseñó que
“contábamos con un punto de acopio en El
Carrascal que tuvimos que clausurar, porque literalmente era una vergüenza; el
vertedero de La Victoria había que sellarlo, que se llevó a cabo el año pasado
por la Junta de Andalucía con un coste de 3,5 millones de euros”.
CINISMO DE
ROMÁN
Estos dos
hechos “han supuesto dos hitos de calidad
ambiental muy importantes en Chiclana, unidos al inicio de la obra del tercer
punto limpio en la localidad, así como el nuevo contrato de gestión de residuos
en Chiclana con Urbaser. El quinto salto
de calidad es esta planta de transferencia”.
Recordarle
a Román que quien llevaba los residuos al Carrascal era él, no venían de fuera,
lo mismo que el vertedero de La Victoria, que estuvo funcionando ilegalmente
durante catorce años por la negligencia del PSOE de José de Mier y Manuel Jiménez
Barrios. El cinismo de nuestro alcalde sigue subiendo. En esto no le
puede echar la culpa al PP.
Siguió
diciendo que “tanto para nosotros como para
Conil, esta nueva estación nos permitirá no tener que llevar los residuos a
Cádiz, en nuestro caso, o a El Puerto en el caso de Conil. Para la mejora del uso, estamos tramitando un
proyecto con la Consejería de Obras Públicas, que es la creación de una raqueta
para facilitar el acceso de entrada al recinto”.
La
superficie que ocupará será de 1,3 hectáreas, en una finca municipal de 24
hectáreas: “De las 100.000 toneladas de
capacidad de la planta, los residuos generados por Chiclana son de 65.000
toneladas al año, mientras que los de Conil son unas 20.000 al año, por lo que
queda margen suficiente para las incidencias que pudiesen venir”, agregó
Román.
LAS OBRAS
PARA FINAL DE AÑO
La planta
contará con tres niveles, pasando de uno superior de descarga de los camiones
municipales, a uno inferior en los que los contenedores los recogerán para su
traslado a la planta de tratamiento, “aprovechando
la configuración del terreno para que aparezcan los diferentes niveles de
operatividad y mejor funcionamiento”.
Declaró
también que “esperamos y confiamos que, sin
perjuicio de dar el tiempo necesario a que el nuevo gobierno entre en acción en
la Junta de Andalucía, podamos licitar las obras por parte de esta
administración autonómica próximamente y podamos empezar las obras antes de que
acabe el año, puesto que el expediente ya está en marcha”.
Antonio
Alba, por su parte, comentó que “Conil es un
pueblo de 22.000 habitantes, pero cuando llega el verano superamos los 100.000.
Esto supone tener que dar unos servicios mayores, que en Conil gestionamos
desde la propia administración y es cuando surgen algunos problemas”.
También ha
recordado que trasladaban los residuos hasta Vejer, “pero esta planta está colmatada y tenemos que transportarlos hasta El
Puerto de Santa María, por lo que para nosotros es una satisfacción que esta
planta de transferencia sea una realidad para no tener que ir hasta allí. Por
ello, esperamos que desde la Junta de Andalucía se le dé el último impulso para
que la realización de las obras se produzca lo antes posible”.
Si los residuos terminan en Miramundo, ¿No seria mejor llevarlos allí directamente? Uniendo la A-390 con Miramundo para reducir costes. ¿O acaso esa planta de transferencia no tendrá costes de mantenimiento y personal?
ResponderEliminar