UPYD presenta su programa marco para las elecciones municipales y autonómicas

“Numerosos cargos inútiles, consejeros y asesores designados a dedo, obras faraónicas inútiles y prebendas lastran nuestra recuperación”

Tras las elecciones primarias en los municipios donde UPyD presentara listas en las próximas elecciones municipales, ha hecho público el programa marco que utilizarán para las elecciones municipales y autonómicas, en el que incluirán proyectos a desarrollar en cada ciudad, Chiclana entre ellas. En nuestra localidad el candidato es Juan Ramón Orellana, que ya avanzó algunas de las medidas que llevarán en el programa electoral.

Señala dicho programa marco que UPyD “como realidad y alternativa política a nivel nacional, no descuida las necesidades y problemas de comunidades autónomas y Ayuntamientos”. Al contrario, desde UPyD Chiclana “sostenemos que la política debe ejercerse a pie de obra, cerca del ciudadano y de sus problemas, y éste va a seguir siendo el compromiso de nuestros futuros representantes, sin pactos ni cheques en blanco que nada bueno han aportado a la política en general y menos aún a la política municipal”.

No obstante, es indudable que actualmente las cuestiones más domésticas “están absolutamente condicionadas por la crisis del sistema político en su conjunto, incluido el municipal, siendo preciso regenerarlo de forma urgente si queremos encontrar solución a la mayoría de los problemas cotidianos a los que debemos enfrentarnos los ciudadanos”.

No se debe olvidar que la crisis económica es tan virulenta en España “por el hecho de que el entramado institucional tejido en los últimos años por PP y PSOE ha producido y produce una estructura administrativa ineficaz, insolidaria, sobredimensionada, manirrota y en gran medida inviable, que lastra nuestras posibilidades de recuperación y desarrollo futuro”.

DILAPIDACIÓN DE RECURSOS PARA PAGAR EL CLIENTELISMO

“La dilapidación de los recursos económicos en pagos al clientelismo –añade UPyD-, los numerosos cargos inútiles, consejeros y asesores designados a dedo, obras faraónicas inútiles que ya todos conocemos, derroche de recursos, prebendas y alegrías electorales con cargo a las arcas públicas pasan factura a todos, lastran nuestra recuperación y se ceban en especial a los más débiles”.

En el programa marco la crisis del sistema político español “nos exige concurrir a las elecciones desarrollado un programa electoral con una visión nacional y de conjunto, que ponga en relación todas las partes de nuestro sistema político ahora que la aguda crisis económica ha desnudado otra crisis aún mayor y de consecuencias más peligrosas: la crisis política”.

Se centra en varios ejes básicos “donde se ha de resaltar la necesidad de devolver el poder al ciudadano, desde los estamentos más básicos de la democracia, los ayuntamientos”.

Dice UPyD que “necesitamos una sociedad y con urgencia un municipio de ciudadanos conscientes y proactivos, capaces de exigir responsabilidades a sus representantes por su propio interés y para que no resulte indiferente a éstos practicar una política efectiva o su contraria, dilapidar, despilfarrar, trapichear y, en conclusión, para que la corrupción no salga gratis ni sea posible someter el interés general a los intereses particulares”.

“Y es que desde UPyD Chiclana pensamos que sacar nuevamente conejos de la chistera meses antes de las elecciones, son artimañas de corta vida y más mediáticas que efectivas, que sólo buscan una vez más embaucar al votante y comprar su voto mediante subsidios” en clara referencia a esa ayuda que se ha sacado de la manga José María Román tres meses antes de las elecciones.

ELIMINACIÓN DE EMPRESAS PÚBLICAS, INEFICACES O DUPLICADAS

En Chiclana, como en otros muchos Municipios y entes públicos, “se ha generado un gasto excesivo en personal de confianza, y en innecesarias empresas mixtas, en un intento de escapar del control de la legislación administrativa mucho más restrictiva y objetiva, y eludiendo así el acceso laboral y el control de y a lo público o pseudo-público a cualquier ciudadano”.

Defiende UPyD el retorno, incluso en empresas públicas, “al sistema mucho más objetivo de las oposiciones públicas, sistema que en muchos casos han sido sustituidas por la contratación directa o por la ampliación recurrente del número de interinos, sobre todo en puestos donde en muchos casos la fidelidad y el servilismo se valora más que la capacidad o el mérito”.

El programa marco ofrece la estructura de desarrollo del posterior programa específico de cada municipio con unos objetivos comunes a todos ellos. Entre ellos destacan la promoción desde la base de un cambio cultural que acepte más evaluación, transparencia y rendición de cuentas, “elementos imprescindibles de toda dirección pública como primer paso para reducir el coste de los servicios públicos, eliminando duplicidades, despilfarros, redundancias, amiguismos y cargos de confianza”.

La eliminación de entes o empresas públicas, ineficaces o duplicadas con las funciones que deben asumir los organismos públicos oficiales, teniendo como referencia el binomio coste-beneficio, y la aportación a la mejora de los servicios a los ciudadanos es otro objetivo.

También la asunción como necesarios en la gestión municipal “de los principios de coordinación, no duplicidad, simplificación, austeridad, cooperación, transparencia, evaluación y rendición de cuentas, dedicando los esfuerzos económicos no a medidas paliativas sino a programas reales de desarrollo, impulso económico a medio y largo plazo”.

Y por último, despolitizar y profesionalizar los departamentos técnicos municipales, “donde los criterios que primen sean los expuestos, los de la ciudadanía y la efectividad y no los intereses del partido de turno, así como “auto limitar los tiempos de los cargos públicos a dos legislaturas como garante de la regeneración democrática”.