Nuevas movilizaciones en el “Caño Romeral” contra la antena de telefonía móvil

La asociación vecinal protestó ante la puerta de Urbanismo contra su instalación, llevada a cabo en 2019.-

Como muchos martes, vecinos del Caño Romeral se han manifestado frente a la delegación de Urbanismo del Ayuntamiento de Chiclana, en contra de la instalación de una gran antena de telefonía móvil en el centro de una zona cercana a viviendas y un parque infantil. Varios miembros de la asociación de esa zona estuvieron con sus pancartas varias horas, denunciando el pasotismo municipal en este asunto.

 

La instalación, colocada durante el verano de 2019, creó un gran malestar entre los residentes del Caño Romeral, quienes pidieron desde el principio que el Consistorio mediara con la empresa instaladora para encontrar una ubicación más adecuada. Esta petición no fue atendida, pues según el ente municipal, la empresa promotora se negó a negociar y a buscar una localización alternativa.

 

El presidente de la AVV Caño Romeral, Antonio Díaz, comentó por qué continúan las movilizaciones: “Llevamos tres años en la calle protestando contra la instalación de esta antena, y pensamos que la concejalía no hace todo lo que se puede. La antena podría haber sido quitada hace tiempo y ni siquiera se han precintado las instalaciones como hemos pedido hace mucho a Urbanismo y a la alcaldía”.

La frustración de los vecinos es evidente. Si bien la respuesta del equipo de Gobierno es que la situación se encuentra actualmente en los juzgados, los vecinos están convencidos de que éste no ha actuado con diligencia: “El Ayuntamiento ha tenido mucho tiempo para quitar la antena o para llegar a un acuerdo con la compañía y buscar una ubicación mejor. En vez de defender los intereses de los vecinos, parece que lo único que ha interesado es que la antena se quede”.

Por este motivo se han llevado a cabo movilizaciones durante todo el mes de febrero ante la puerta de Urbanismo, aunque según han comentado, van a continuar mientras la antena no se desmantele: “No vamos a renunciar a que el Ayuntamiento y la concejalía de Urbanismo cumplan con sus obligaciones. En nuestra opinión, ha habido una falta de diligencia enorme por parte de la inspección de esta última, con consecuencias nefastas para los vecinos. En estas condiciones, pensamos que la edila de Urbanismo debería asumir sus responsabilidades políticas”, asevera Díaz.