PP y PVRE aprueban reclamar a la adjudicataria del centro comercial de La Longuera que inicie el proyecto
El Pleno municipal aprobó ayer con los votos del gobierno local (PP-PVRE) y las abstenciones de PSOE e IU, una propuesta en la que se reclama a la adjudicataria del centro comercial de La Longuera que inicie el proyecto. Le dan tres meses de plazo para que presente la documentación precisa..
En concreto, se requiere a las empresas que forman la Unión Temporal de Empresas, adjudicataria del derecho de superficie para construcción y posterior gestión del centro comercial y de ocio proyectado en La Longuera, que redacten y pongan a disposición del Ayuntamiento el documento preciso para la aprobación definitiva del Plan Especial de Desarrollo de la Unidad de Ejecución 6-UE-12-PE La Longuera y la obtención, en caso de resultar necesario, de la licencia comercial exigible por la comunidad autónoma.
El portavoz del gobierno, Andrés Núñez, que ha defendido la propuesta, recordó que “fue en 2006 cuando fue adjudicado el proyecto, que llegaba para situar a Chiclana en el mapa de centros comerciales de la provincia”.
Manifestó que “entonces ya se planteaba problemas con la plaza de toros, se planteaba el soterramiento de la avenida de Diputación, algo difícil de llevar a cabo, la Ronda Oeste no existía ni como proyecto y, encima, la licitación no se hace correctamente y es anulada por los tribunales, con lo que hay que volver a licitar el proyecto”.
RENUNCIA AL PROYECTOEl concejal de Presidencia comentó que “tras años bloqueado y de mantener reuniones con la empresa, ésta ha mostrado su interés por llevar a cabo la resolución del contrato, algo por lo que este equipo de gobierno insta a la empresa a que cumpla con sus obligaciones contractuales, pues no podemos tener en el centro una parcela sin ponerla en carga y darle uso, y todo por el hecho de que ocho años después sigue sin ni siquiera hacerse los trámites administrativos previos necesarios para su puesta en marcha”.
El objetivo municipal es que se ponga en marcha y si la empresa no quiere, lo tendrá que decir. Pero por este gobierno no va a quedar y va a poner todas las armas administrativas que haya, porque las del diálogo se han agotado”.
Cabe recordar que la firma ha presentado varios escritos “buscando renunciar al proyecto, alegando su supuesta inviabilidad por la falta de PGOU y de la Ronda Oeste, algo que está solucionado por el hecho de que las Normas Sustantivas dan cobertura jurídica al proyecto y a que el informe negativo al que alude el Ministerio de Medio Ambiente es un trámite burocrático que se subsanará, pues ya existe un precedente que así lo corrobora”, afirmó el portavoz del gobierno local.
Núñez aseguró que “el vigente planeamiento general en este municipio constituido por las Normas Sustantivas de Ordenación, permite el desarrollo del ámbito urbanístico concreto objeto del contrato, mediante la aprobación de un Plan Especial”.
LAS ALEGACIONES DE LA EMPRESA NO SE SOSTIENEN
Incidió en que “el Plan Especial que en su día fue presentado no tuvo desarrollo alguno, por cuanto fue informado desfavorablemente por el Servicio de Urbanismo, siendo notificado este extremo a la entidad adjudicataria. Tampoco fue presentado ni el proyecto de urbanización ni el de reparcelación, al no existir Plan Especial, por lo que la viabilidad urbanística del ámbito en cuestión encuentra cobertura jurídica en las Normas Sustantivas de Ordenación actualmente vigentes”.
El edil agregó que “sobre la no viabilidad de la Ronda Oeste como excusa para intentar renunciar al proyecto por parte de la adjudicataria, hay que incidir en que, además de que tiene solución, la causa alegada cede y queda en un segundo plano ante la no presentación de un Plan Especial”.
El plazo fijado para que la adjudicataria presente la documentación requerida es de tres meses, contados desde la notificación del presente acuerdo”.
Finalmente, Andrés Núñez resaltó que “se trata de un proyecto muy importante para reactivar la economía y generar empleo en diferentes sectores de Chiclana, pues a los puestos de trabajo directos que se crearían en su construcción y una vez que los negocios abriesen, habría que sumar los empleos indirectos que genera un proyecto de este tipo”.
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