El desahogo del guerrero
Teodolito [colaboraciones].-
Llegado a este extremo y viendo -sobre todo- la pesadumbre que me rodea, no he tenido más remedio que hacerle algunas preguntas al jefe del gobierno actual. Sr. Rajoy, a sabiendas de la “herencia recibida”, ¿ha sido el pueblo el que a arruinado nuestro paĂs?, entonces, ¿por quĂ© hacer caer sobre Ă©l todo el sufrimiento de los actos de otros, cada vez que la señora Merkel le tira de la oreja?
Y ahora la frĂa y cruda realidad le hace volver y pedir el voto a todos esos individuos que usted ha maltratado con su nefasta gestiĂłn. ¡IronĂas de la vida! Dicen que salimos de la crisis, ¿por quĂ©? Muy sencillo, porque a pesar de todo, ustedes siguen ahĂ y seguirán “calentitos”, con sus excesivos sueldos -aunque el suyo no sea de los más altos-, con su buena casa con jardinero y cocinero incluidos.
Ha creado una Ley de Transparencia con dos manos de asfalto, para ocultar lo que ya todo el mundo sabe, que seguiremos dando caviar a mil y un golfos y que seguirán vuestras mercedes mirando para otro lado mientras el pueblo no tiene ni mierda en las tripas.
Señor Rajoy, sabe como yo, que en este paĂs quien roba una gallina va a la cárcel, pero no la pisa quien lo arruina. Hemos visto cĂłmo ha sido “toreado” vilmente -junto con todos los que nos sentimos españoles-, por el malogrado gobierno catalán. Y sin embargo todo va bien.
Porque no sĂ© si se ha dado cuenta, pero muchos españoles de bien, aparte de querer tener para comer “con el fruto de nuestro esfuerzo”, tambiĂ©n queremos tener un gobierno sin complejos y una naciĂłn donde poder vivir y trabajar sin que un puñado de caraduras se enriquezcan con nuestro esfuerzo.
SOPA DE SOBRE
QuĂ© bien, señor Rajoy, hoy al abrir la cartera vi que me habĂa dejado dinero para el cafĂ© bajando el IRPF y el otro dĂa me di cuenta, sorprendido, que la aguja de la gasolina de mi viejo coche, subĂa un poquito más de lo habitual con los veinte euros que siempre le pongo.
Es más, hablando con mi anciana madre me contaba que le ha subido 1,70 € su pensiĂłn. ¡QuĂ© alegrĂa el saber que está ahĂ para hacer que los que la hagan la paguen! Que por eso digo yo, ¿quĂ© daño habrá hecho mi madre para merecer tal castigo?
Por lo visto nos va a dar una “limosnita” de 426 € para que podamos -al menos- poner un puchero. ¡QuĂ© lástima! Ya mi anciana madre se presentĂł voluntaria para ponernos a mi familia una sopita de sobre, que es lo que ha podido comprar con el euro setenta de su cacareada subida de las pensiones.
Señor Rajoy, hace tiempo -no es nada nuevo-, el ciudadano perdiĂł su orgullo pero seguramente no estará dispuesto a perder su dignidad al ver lo que ocurre en este paĂs bananero con los que de verdad lo han empobrecido y denigrado.
Ya se imaginará que quien se empobrece y denigra no es el paĂs como territorio sino sus ciudadanos que lo forman y mantienen con su esfuerzo diario.
¿Por quĂ© despuĂ©s de casi llevarnos a la tumba nos da para ponernos dos velas?”.
MARIONETAS
Dejen de tratarnos como imbĂ©ciles e inmaduros -al menos a quienes no lo somos-, ¿no habĂa otros bolsillos que vaciar?, ¿tenĂa usted que quitarles el dinero a los que casi no tenĂan? Cierta esa frase de que “la mierda nunca cae hacia arriba”, pero es que han sido los de arriba quienes se llevaron la pasta a manos llenas y dejaron nuestras vidas en manos de la providencia.
¿Por quĂ© se permite que en una administraciĂłn corrupta como la de la Junta de AndalucĂa, siga teniendo a uno de sus mayores exponentes de esa corrupciĂłn gobernando a todos los andaluces? ¿En este paĂs ya no hace falta votar para tener presidente? Con el “quĂ©date que yo me voy” ¿todo arreglado? A presidente corrupto “muerto”, presidente corrupto puesto.
Usted, señor Rajoy, como toda “su casta” y la que está por venir, ¡sĂ!, todos esos que os llaman casta sin saber que ellos tambiĂ©n lo son sin haber tocado poder. No, señor Rajoy, nadie hará lo que hay que hacer para que nuestro paĂs sea lo que muchos queremos. Por todo ello no tengo más remedio que pedirle, ¡váyase usted y toda la casta!
Un garbanzo que cae en una olla de puchero, se convierte en puchero. Porque no nos engañemos, todo polĂtico que está o vendrá, será para lo mismo, para tratar al ciudadano como a una marioneta y, de paso, ganar unos “euritos”, porque si no, no se entiende que todos quieran estar ahĂ.
Señor Rajoy, ya nos tomamos las uvas de la suerte, donde todos formulamos un deseo para el nuevo año, el mĂo ha sido “tener dinero para comprar las prĂłximas uvas”.
Recuerdos de mi anciana madre.
Veo que aun hay personas que creen en los reyes magos. Lo digo por que algunos aun piensan que los que gobiernan son los polĂticos. Ya haced muchos años que lo dijo un Rothschild '"Dadme el control de la moneda de un paĂs y no me importará quiĂ©n hace las leyes".
ResponderEliminarSeguimos mirando el dedo cuando señalan al cielo.
Sr. Braza, la frase famosa es: “Cuando el sabio señala a la luna, el necio mira al dedo” y se le atribuye a Confucio.
ResponderEliminarA veces, muchas veces hay que mirar al dedo para saber en que direcciĂłn esta la luna.
Venditos necios.
Pues ya lo dice Confucio, es el necio el que mira el dedo. Y son los necios los que miran al gobierno de turno, cuando hay que mirar a los que manejan los hilos.
ResponderEliminartotalmente de acuerdo con Jacobo, los polĂticos son los "fusibles" de este sistema.... están ahi para proteger al sistema y que permanezca intacto.. ¿que se "calienta" la sociedad por las medidas que toman los polĂticos a las ordenes de ese puñádo de familias que dominan el sistema?... pues nada, si se quema el polĂtico, se cambia... y asi no se "recalienta" el sistema y permanece intacto. Como dice Jacobo... dejar de hablar de psoe y pp... y empezar a hablar de Rotchild, Rockefeller, JP, Morgan, Chase, Monsanto, Goldman, etc..... meterle mano al HSBC, al BCE y al FMI......... preguntarle a la Merkel quien le da las ordenes......
ResponderEliminartodos saben la solucion pero ninguno se mancha las manos, es el pobre el que tiene que luchar en las trinchera para llenarles la barriga.
ResponderEliminar