La planta de transferencia se ubicará en La Victoria, en el vertedero ilegal que el PSOE abrió y utilizó catorce años

Saldrá a licitación por tres millones de euros y tendrá un plazo de ejecución de diez meses.-

La Junta de Gobierno Local aprobó el proyecto de la planta de transferencia de residuos sólidos urbanos (RSU) de La Victoria. Contará con un presupuesto base de licitación de 2.989.934 euros y un plazo previsto para la ejecución de las obras de diez meses. Así lo anunció el delegado de Medio Ambiente, Joaquín Páez, señalando que la Junta de Andalucía sacará a licitación las obras en breve.

La nueva estación de transferencia tendrá capacidad para dar servicio a los municipios de Chiclana y Conil, siendo supramunicipal.

Se construirá en la parcela del antiguo vertedero de La Victoria, que mantuvo abierto ilegalmente el PSOE durante catorce años, contaminando el entorno y arrojando lixiviados al río Iro, en vez de llevar las basuras a Miramundo como debía. Este lugar no cumplía ninguno de los requisitos medioambientales y la Junta de Andalucía no intervino a pesar de las denuncias de los grupos ecologistas.

Páez, con su cinismo habitual, manifestó que ahora “las instalaciones cumplirán con todas las expectativas medioambientales y de ahorro económico y medioambiental que nos habíamos propuesto este equipo de Gobierno”.

HECHO HISTÓRICO BLANQUEADO

El edil ha considerado un hecho histórico que “en este periodo corporativo se cierra el ciclo más importante de inversiones en infraestructuras medioambientales para la gestión de residuos llevadas a cabo en la ciudad en su historia. Nunca antes habían concurrido tantos proyectos de gestión e inversión a favor del medio ambiente y en beneficio ciudadano”.

Siguiendo en esta línea comentó que “se ha sellado el vertedero de La Victoria; se ha abierto un nuevo punto para la recogida de enseres en Pelagatos y clausurado el punto de acopio de El Carrascal, que no reunía las garantías ambientales necesarias”.

Páez siguió echando flores a su partido y en especial a su alcalde: “El vertedero de La Victoria se pudo clausurar con ayuda económica de la Unión Europea, gracias a que hace años Román consideró prioritario adquirir para la ciudad los terrenos en los que se ubicaba el vertedero de La Victoria. Por la misma razón, ahora se puede instalar esta planta de transferencia; por la visión de un alcalde que se adelantó a los acontecimientos para facilitar que lo que ahora estamos anunciando sucediera”.

Otras matizaciones al concejal. El sellado del vertedero es otra vergüenza socialista, local y autonómica, ya que además de consentir su apertura casi tres lustros, la Junta se comprometió a pagar el sellado y al llegar el PP a la alcaldía se echó atrás y dijo que tenía que abonarlo el Consistorio. Con la llegada de Román cambia de opinión y pagó el doble de lo que costaba años atrás con el PP en el gobierno. Derroche político, uno más, del PSOE.

GARANTÍAS MEDIOAMBIENTALES

En cuanto al Carrascal, Páez se supera, ya que habla de dicho lugar como si no tuviera que ver con su partido, reconociendo que no reunía “las garantías medioambientales necesarias”, pero no dice que fue su formación la que arrojó allí las basuras y, por tanto, la culpable de ese delito ecológico, con este concejal al frente de la delegación responsable. Páez y el PSOE crearon el problema y ahora nos lo venden como que lo han arreglado ellos.

El objetivo de esta instalación es mejorar los costes de transporte, utilizando equipos adecuados y compactando los residuos para optimizar el traslado hasta el centro de tratamiento, situado en la planta de Miramundo. Las obras requerirán el acondicionamiento del terreno, la realización de obra civil, la instalación de suministros, elementos de urbanización y dotación de maquinaria y equipamiento.

La capacidad prevista es de 100.000 toneladas. Actualmente entre Chiclana y Conil, las dos poblaciones que compartirán esta estación, se generan 75.000 toneladas al año. Se ha aumentado el margen de seguridad de tratamiento de residuos en 25.000 toneladas en previsión del crecimiento poblacional.

La zona de descarga de residuos se organiza en tres niveles. El primero de RSU; otro nivel medio destinado a la fracción de residuos de naturaleza selectiva y el tercero fracción resto.

RECOGIDA SELECTIVA

Los materiales de recogida selectiva inicialmente admitidos serán los de papel y cartón, vidrio, madera, muebles y enseres, envases y los de fracción resto serán principalmente de poda o jardinería. Estos residuos se seleccionan previamente, con lo que se llevarán menos toneladas al vertedero y el consiguiente ahorro, según el delegado.

Contarán con una báscula de pesaje de camiones de 60 toneladas, una compactadora de rodillo para voluminosos de madera y restos de poda, dos compactadoras estáticas para fracciones y dos unidades de compactación de RSU formadas por tolva de 80 metros cúbicos con empujador lateral, compactador y mesa de transferencia con transferidor para contenedores.

Resaltó Páez que “ahora tendremos unas instalaciones de gestión de residuos también incomparable, porque van a ser pocas las ciudades de Andalucía equiparables a nuestro municipio”.

Páez no necesita abuela. Se han cargado el medio ambiente de Chiclana en sus 35 años de gobierno y nos sale con que como Chiclana no hay nada.