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Chiclana, cuna de oficios- Cristalero-Pepe Moreno, el cristalero: Para enmarcar


 
PEPE VELA M. [colaboraciones].-

Esta mañana fallecía Pepe Moreno, el cristalero, tras varios meses luchando contra una enfermedad. En los últimos tiempos ya no salía de su casa ni acompañó a sus compañeros de la Peña Carnavalesca Perico Alcántara, de la que fue uno de sus fundadores, ni al grupo del que formó parte durante varias décadas, Pazocalle. Tenía 71 años, a punto de los 72.

 

Desde PUENTE CHICO le damos nuestro pésame a sus familiares y amigos, así como a sus compañeros de la peña citada. En homenaje les ofrecemos la entrevista que publicamos en febrero de 2018, en la sección Chiclana, cuna de oficios. El carnaval chiclanero pierde a una de sus figuras. Descanse en paz.


El cristal es un producto que forma parte de nuestra vida cotidiana. Su uso está presente en muchos productos, desde los envases domésticos, vasijas, cristalerías, ventanas de vehículos o para uso de ventanas y puertas del hogar. En este apartado, en los años 60, los cristales se encargaban en las ferreterías hasta que desde Medina Sidonia llegó Carlos Moreno, el precursor de la cristalería en Chiclana. Con él aprendieron muchos el oficio, El Yeyo, Andrés, José Mari y otros.

 

Pepe Moreno Manzano nació en la calle Botica el 5 de julio de 1950. De familia hortelana, como muchas chiclaneras. Cumplidos los 6 años su familia se trasladó a la calle Carmen Picazo, frente al Puente Chico. En esa casa sus padres vivían en la parte de arriba y abajo, en la calle de atrás, es donde tenían el corral, guardaban los aperos y los animales.



En la parte delantera le montó a su hermano Antonio una tienda de comestibles, que ha estado abierta hasta que éste se jubiló. Salió del colegio de los Agustinos con trece años, yéndose con él a trabajar. Estuvo varios años en la tienda hasta que la competencia de los economatos les restaba beneficio, no dando para dos sueldos.

Entonces decidió probar con su padre en la huerta, estando alrededor de dos años, sin satisfacerle mucho el trabajo y sin encontrar algo que le gustara. Corría el año 1975 cuando José Manzano Ramírez, El Yeyo terminó las relaciones laborales con Carlos Moreno y es entonces cuando se cruza en el camino de su primo Pepe Moreno, le cuenta lo que le había pasado y Moreno le ofrece montar un negocio en la parte de atrás de la casa de sus padres, en la calle Virgen del Carmen, detrás de Carmen Picazo, cuyo nombre sería el de la futura sociedad.



VIENTO EN POPA

El Yeyo está de acuerdo, con la condición que venga con ellos Andrés Celis y así iniciaron ese año entre los tres la nueva cristalería, con 50.000 pesetas que había cogido El Yeyo de su despido, creciendo desde entonces sin parar e incorporando a más trabajadores, entre ellos a José Mari y Antonio Ladrón, naciendo Cristalería Picazo.

 

Esta sociedad está todavía vigente. En 1986 se crea la cooperativa citada, instalándose en El Torno, decidiendo no participar. Se quedó donde ha estado desde el principio. Se dio de alta el 8 de octubre de 1986 como cristalería Pepe Moreno, incrementando el servicio que prestaba con persianas, y lo que han sido sus productos estrellas: los marcos.

 

Con éstos es donde encontró su logro profesional por estar relacionado y en contacto con el arte. Es donde más se ha sentido realizado a nivel profesional, llevándolo hasta su jubilación en 2012. Por su casa han pasado todo tipo de clientes, la mayoría de gente de Chiclana que tenemos algún marco suyo y también famosos que veranean en nuestro pueblo.


FĂšTBOL Y CARNAVAL

 

Su gran pasión es el fútbol, que jugaba siendo niño, llegando a estar en los infantiles y juveniles del Chiclana, terminando su periplo en el Vejer, donde se retiró con 24 años. Tuvo que sustituir la pasión por el futbol por otra y la encontró en el carnaval, siendo cofundador de la Peña Perico Alcántara en el año 1979 junto a Perico Torres, José Ramos Periñan y Diego Leal, Manchanero.

 

La primera chirigota en la que cantó fue Los despistaos, con letra y música de Perico Alcántara. Entonces nació el Grupo Pazocalle, con componentes de dicha peña y también fuera de ella. Las primeras letras se las escribía Manolo Meléndez y otras Pepe El Barbero, ambos notables de nuestro carnaval. Algunas de esas agrupaciones también llevaron letras suyas.



GRUPO PAZOCALLE

Me cuenta que la chirigota en la que más ha disfrutado es con La loca academia de Manolito Sevillana, además de Los bomberos loreros, Los piratas del Mississipiro, Los güenos o Los marinos de Durce, chirigota graciosa de la Isla, pero la que recuerda que más caló en la gente fue Chiclana Pura, que representaba a personajes conocidos y emblemáticos de Chiclana.

 


Uno de los estribillos más famosos fue el de Los bomberos loreros:

¡Fuego en el ayuntamiento!

¡Que no se queme ningĂşn papel!

¿Y los trapos?

¡DĂ©jalo, Paco!

¡DĂ©jalo!

 

Casado con Isabel Chaves Avecilla, a la que conoció cuando tenía 15 años, han tenido tres hijos, Anabel, José Javier y Mari Carmen, con la que montó una tienda de manualidades siguiendo los pasos de su padre. Su hijo le ha cogido el relevo y continúa con su negocio después de que se jubilara hace seis años.

 

Alas de cristalero, corazĂłn de futbolista, alma carnavalera y pinta de torero, todo un personaje del que podemos disfrutar y todos los que lo conocemos podemos sentirnos contentos con su amistad. Es el tipo de persona que bien podemos enmarcar en nuestras vidas.

 

 

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