La peor de las derechas

Fumanchú, el CHINAclero disconforme [colaborador]

Tengo mucho en contra de la derecha. Sí claro, creo que tengo en contra de la derecha todo mi ser, la derecha como ideal como doctrina y como actitud de vida.

Pero estos de la izquierda ya me dirán dónde meto yo a esta gente que en 30 años no ha levantado un solo dedo para señalar a un ladrón, que no ha pasado ni un solo minuto en un lugar comprometido y difícil, esta izquierda joven como yo lo era que se fue distanciando de mí poco a poco hasta que acabó visitándome cada 4 años y con gente que jamás conocí, que no ha sido capaz de defender mis derechos como trabajador ni conservar mi puesto de trabajo, esta izquierda tolerante que tolera esos abusos en esas gestorías y con esos intereses con los llamados nuevos e inteligentes empresarios.

Esa izquierda sindical que por lo visto solo medio funcionó en las grandes empresas estatales porque el dinero de todos no es dinero de nadie, sin ni siquiera intervenir nunca en el miserable sueldo ni en la vida de un trabajador privado. Esa izquierda de la cual me decía que tenía que reclamar y que tenía que reivindicar cuando yo tenía trabajo y mi familia era más estable y ellos solo vestían con chaquetas de pana mientras se revolcaban en los pinares que después convirtieron en grandes urbanizaciones de lujo, porque reclamar y reivindicar era su razón de ser. Pero yo solo me conformaba con mi trabajo, mi familia, mi estancia y mi felicidad. Mira por donde esa era y esa es mi cochina condena, quería defender mi trabajo y tener las noches y el fin de semana para practicar felicidad y ganar lo poco que hubiese ganado con total honradez. Vaya mierda ¿verdad?

¿Cuántas personas como yo? El tejido productivo, la cotización con dos patas, el gilipollas ignorante y cómodo que no quería saber nada de política, porque resultaba que para ellos levantar un país no era trabajando sino reivindicando, movilizándote o reclamando, total ¿para qué, para quién?

Sí. Es cierto. Lucharé hasta mis últimos días con la derecha pero ustedes no se van a librar, para mí sois la peor de todas las derechas porque no hay peor derecha que una falsa izquierda. No toleraré vuestra actitud cómoda haciendo declaraciones en contra de la derecha rancia para que ustedes, la derecha agria y venenosa, engañe, confunda y divida lo que ya está descubierto. Porque una persona, aunque sea medio analfabeta, con dos deos de frente, como sea honrada, honesta y decente es seguro que os ha descubierto el chollo ya a todos y poco tenéis que hacer.

Repartiros como hermanos, cuñados, sobrinos e hijos de las siete mil los últimos suerdazos en el resto que os queda de Ayuntamientos y Diputaciones, que aquí os estaremos esperando vuestros primos de siempre para ser vuestros protagonistas en vuestras pesadillas futuras, porque de la infelicidad nadie se libra y vosotros no vais a ser menos, ésa no se compra ni se vende, ni se refriegan a los demás a la cara como habéis hecho con vuestras vidorras de aquí a 30 años atrás.

No habéis practicado con el ejemplo. La doctrina que habéis vendido es la misma que vendió la iglesia que tanto criticáis: “HACER LO QUE YO DIGO, PERO NO LO QUE YO HAGO”, habéis ido de la manita con el diablo poderoso y ruin de las grandes multinacionales y los grandes bancos. No os habéis acercado a la gente.

Queridos vendedores de sueños e ilusiones adulteradas y caducas, os deseo que viváis todos los mismos años que voy a vivir yo por lo menos para vernos por la calle y miraros a la cara, si es que me lo permite la vida, y me despido de ustedes deseando que este pequeño articulo no moleste a nadie, nada más que a todo aquel sinvergüenza que se dé por aludido.