EDITORIAL SEPTIEMBRE 2019-Menos semanas de movilidad y más soluciones a los problemas de tráfico

En muchas ocasiones hemos hablado de los problemas de tráfico en Chiclana. No es nuevo, por tanto, pero sí cada vez más desesperante.-

Y eso que todavía no ha empezado a funcionar el tranvía –si es que algún día lo hace-, porque entonces el caos será mucho mayor. Y decimos caos porque es así cada día. Y ahora que han comenzado las clases, las colas son interminables.

La Alameda Solano se colapsa cada día debido a la desaparición de dos de sus cuatro carriles por culpa del tranvía. Es habitual que haya colas desde El Pájaro hasta la rotonda de la Venta Agustín. Si una ambulancia tiene que pasar en ese momento se queda parada porque los vehículos no pueden apartarse y ésta tampoco puede ir por otro sitio. Lo mismo ocurre si es la policía o los bomberos.

Para entrar en la ciudad por esa vía hay que dar una vuelta por Bodegas Vélez, ir hasta la calle Virgen del Carmen y llegar a la Plaza de Andalucía, con coches que vienen por Montes y la citada en primer lugar, con lo que tenemos atascos en varios sitios. En El Pájaro más de lo mismo. Y si el tranvía está haciendo pruebas, el tráfico es más caótico todavía.

Esto ocurre a diario, pero con el inicio del curso escolar se agrava, principalmente a primera hora de la mañana y a la salida de los colegios. A esa hora, la Avenida del Comercio, en el polígono El Torno, también registra enormes colas, que se propagan por gran parte de esta zona comercial.

En Urbisur la historia es la misma, casi a todas horas, y en las de entrada y salida del trabajo se multiplica. En las horas punta sucede lo mismo en la Avenida de la Diputación, Doctor Pedro Vélez, Carboneros, Alcalde Blázquez, carretera de Fuente Amarga, etc., etc., etc.

INHIBICIÓN DEL ALCALDE

Desde la delegación de Tráfico no se hace nada para intentar paliarlo. En julio y agosto hemos tenido colas kilométricas cada día, por la mañana al ir hacia la playa y por la tarde para regresar de ella. ¿Tomó alguna medida el edil de Tráfico? No. Se inhibió olímpicamente. No colocaron conos para tener dos carriles a la ida y otros dos a la vuelta; no había policías ni nada que contribuyera a paliar estas caravanas playeras.

Tampoco puso medios para evitar en lo posible la aglomeración de coches antes y después de los conciertos de Sancti Petri. Llegar a La Barrosa después de las 11,00 horas provocaba que no encontraras un aparcamiento en la zona. Demasiados vehículos para tan pocos lugares donde estacionar, por lo que hay que dar vueltas y vueltas, ocasionando más embotellamientos.

Se supone que nuestros munícipes están y cobran para facilitar la vida de los ciudadanos, no para fastidiársela como hacen habitualmente y en el caso que nos ocupa queda claro el desinterés municipal, que a pesar de llevar gobernando 35 años, no ha sido capaz de buscar alternativas a este problema endémico. Pero lo peor es que tampoco han hecho ningún esfuerzo.

Por eso, resulta chocante el autobombo que da a la Semana Europea de la Movilidad, cuando en Chiclana movernos nos movemos poco y no precisamente por gusto, sino por el tiempo que pasamos haciendo cola. Dicen que vayamos en autobús, en bicicleta o andando porque es más sano y ecológico.

Pues si tanto le preocupa a nuestro alcalde y al concejal el medio ambiente, que apliquen fórmulas para acabar con las colas y atascos y así nuestros vehículos contaminarán menos mientras esperan. A Chiclana le hacen falta infraestructuras y un buen plan de tráfico, lo que nuestros gobernantes no han hecho nunca. ¿Lo harán algún día o seguirán sin prestar atención a este problema?