Necesita una prótesis que solo hacen en Barcelona, pero el SAS se niega a enviarlo allí como al principio, obligándole a ir a ortopedias andaluzas que no han sabido realizarlas
“Nací sin peroné en la pierna derecha, que
tiene veinte centímetros menos y sin la prótesis no puedo andar. Las de aquí no
me sirven, me hacen sangrar y me he caído varias veces”.-
José Manuel Hernández García tiene 39
años y desde que nació padece dos enfermedades calificadas como raras, aniridia
(ausencia total del iris) en el ojo y agenesia de peroné (falta de peroné),
además de tener tres dedos solo en la pierna derecha.
Le falta el hueso de dicho peroné, por lo que la pierna tiene veinte centímetros menos y necesita una prótesis para poder andar. Lo primero que le hicieron a los tres años en Cádiz fue un aparato de hierro y en Barcelona no fue hasta los 13 cuando le pusieron la primera prótesis, pero en 2005 el SAS lo derivó a una de Sevilla. Desde entonces todo ha ido de mal en peor y las prótesis que le han confeccionado en diversas ortopedias andaluzas le han provocado infecciones, dolores, caídas etc.
José Manuel Hernández está desesperado: “Tengo una ortesis (prótesis) en la pierna derecha por una agenesia de peroné de nacimiento y acortamiento de unos 20 centímetros. Dicha ortesis me la hicieron en el Instituto Técnico Ortopédico de Barcelona, y a través del Dr. Viladort y hasta los 13 años he estado realizándomela allí. Siempre he ido para que me hicieran las medidas y moldes y luego he pasado tres o cuatro días allí y me la he traído sin ningún problema”.
Lo suyo es
enfermedad rara, pues así lo contempla la Asociación
Española de Enfermedades Raras. Es muy complicado que una ortopedia suela
hacer una prótesis parecida o casi igual. Las tres primeras se las hicieron en
Barcelona, “pagando mis padres dichos
importes y después el SAS se lo abonó a ellos”. Dentro de lo malo al menos
podía llevar una vida medio normal, dentro de la normalidad que conlleva que
casi no veas y necesites una prótesis para poder andar.
COMIENZA SU CALVARIO
Pero en 2005 el Servicio Andaluz de Salud cambió de idea “y me derivaron a una ortopedia de Andalucía para podérmela realizar aquí”. Fue a IDEO de Sevilla, “pero después de un año realizando muchas pruebas y haciendo muchos viajes allí, pusieron una en Cádiz y seguí probando. Me hicieron prótesis distintas y al final no pude salir de la ortopedia con ella, pues me realizaron solo la prueba, teniendo heridas y sangre en la misma habitación”.
Tras este fracaso fue a la ortopedia gaditana de Ramón, y le pasó lo mismo, “teniendo que estar varios meses de pruebas para dejar por imposible dicha prótesis he irme con mi propio dinero a Barcelona, para lo que tuve que pedir un préstamo por el gran importe que supone”.
DENUNCIA ANTE EL DEFENSOR DEL PUEBLO ANDALUZ
Reclamó al Defensor del Pueblo Andaluz, pues las pruebas eran evidentes y del tiempo que llevaba probando sin éxito en otros lugares, dándole la razón y el SAS le autorizó de nuevo a realizarla en la ciudad catalana, así como el pago de las mismas a través del presupuesto del Hospital Puerta del Mar de Cádiz. Se lo autorizaron para otros cuatro años. Cada prótesis debe cambiarse cada dos, pero José Manuel suele alargar más su duración para ahorrarle dinero al SAS.
Pasados los cuatro años otra vez el Servicio Andaluz de Salud le dijo que le hicieran la nueva en nuestra comunidad a pesar de los nefastos resultados anteriores: “Llevo esperando casi dos años para que me autoricen una, tengo una de Barcelona de más de 5 años, ya casi 6, que está bastante mal. Querían que me la realizará en Andalucía de nuevo y volví a probar, primero en Sanicor, en Jaén, yendo en tren desde Chiclana para que me hicieran un presupuesto”.
Pero nada cambió respecto a los otros intentos: “Me abrieron la prótesis para ver el tipo de pie que tenía y me la dejaron mal puesta. Al día siguiente tuve que acudir al Jefe de Rehabilitación del Puerta del Mar para que viera que me habían estropeado ésta. Me mandó a la ortopedia de enfrente, Garo, para que me la arreglaran. Tres veces tuve que ir porque no me la acababan de colocar bien y la alineación sigue mal aún y haciendo ruido cuando ando porque no está bien colocado”.
RUTA POR ORTOPEDIAS Y CHAPUZAS DE ÉSTAS
Después de todo esto, y viendo que necesita de forma urgente la prótesis, decidió pedir en otras ortopedias de la zona presupuestos y donde le puedan garantizar que la hacen bien: “Fui a la Ortopedia Jerezana de Jerez y para darme el presupuesto me abrieron el pie de nuevo para verlo y poder saber cómo se realiza, al no haberse hecho nunca en Andalucía una de este tipo. Me lo pegaron con un trozo de esparadrapo, por lo que no daba ninguna confianza. No volví”.
Su odisea en busca de una prótesis bien hecha no acabó ahí: “Luego he pedido presupuesto a San Dionisio de Jerez. Me hicieron una, pero nada más dármela para probarla en casa, me la puse de mi habitación al salón, unos 20 metros (menos mal que no salí ni a la calle), se rompió el pie y caí al suelo doblándome la pierna, aunque, afortunadamente, no pasó nada más ya que reboté con el sofá”.
DOS CAÍDAS POR PRÓTESIS DEFICIENTES
A pesar de todo, José Manuel le dio una nueva oportunidad y regresó para que se la arreglaran, “pues solo aparecía un poco de pegamento en las palometas que agarran con el molde de mi pie. Me lo reforzaron, supuestamente, con fibra de carbono, pero parece una cinta aislante de caja de color, reforzada supuestamente. Pero noto que al probarla se va despegando y soltando, haciendo ruido”.
Se fue para
su casa y a los dos minutos de probarla “me
caí con la mala suerte esta vez de hacerlo de espalda, dándome en el trasero, la
cintura y la muñeca, teniendo que llamar una ambulancia para que me llevara al
hospital por los dolores de espalda que tenía”. Por suerte, “no me rompí nada, pero estuve una semana en
reposo por los dolores y con medicación y aún sigo algo dolorido por la parte
lumbar”.
PASOTISMO EN EL PUERTA DEL MAR
En cualquier lugar medianamente normal, este grave problema estaría ya solucionado, sobre todo porque se sabe dónde le pueden hacer una prótesis en condiciones, pero en Andalucía, en el SAS concretamente, esta es una de las muchas historias que ocurren casi a diario, con fácil solución, pero que su cerrazón provoca muchos y graves problemas a estas personas.
Recuerden lo que publicamos en abril de Fran Peña, tetrapléjico, al que mandaron a Toledo y años después lo obligaron a ser atendido en hospitales andaluces sin los medios del citado, estando a punto de perder la vida por lo que le hicieron. Diecisiete años después consiguió que le derivaran de nuevo al centro toledano.
Se supone que el subdirector de Atención a la Ciudadanía del Hospital Puerta del Mar debe ayudar al paciente que se lo pida, pero no ha sido así: “He ido en muchas ocasiones, en las dos últimas le llevé la prótesis para que vean como la hacen en Andalucía. Le he pedido cita con el Jefe de Rehabilitación, el doctor Rogelio del Pino y solo me dice que vuelva a la ortopedia y que me la arreglen, que no puede hacer nada más”.
PEDIR CRÉDITOS PARA SUS PRÓTESIS
Pero hay más: “No se preocupó de la caída ni del daño que pudiera tener, por si necesitaba rehabilitación o algo y tampoco me auscultó. Solo me repitió que fuera de nuevo a la ortopedia, con el gran riesgo que corro y el miedo a que me pueda caer en la calle y darme un mal golpe. Le pedí y rogué que me dijera como especialista en este asunto, cuál era la ortopedia adecuada y que sabe que lo van hacer bien en Andalucía, pero no quiso darme dicho dato, solo me dijo que puedo ir a cualquiera”.
Ha pedido al hospital citado y a la Consejería de Sanidad, “que me digan la ortopedia ideal para dicha prótesis por lo especial de la misma, ya que se hizo en exclusiva para mí y con un sistema totalmente distinto a una amputación, pero no me quieren responder ni tampoco enviarme como en otras cuatro ocasiones a la de Barcelona, que sí sabe hacerla”.
Puede ir a un perito ortopédico para que certifique cómo está hecha la prótesis, contratar un abogado y poner una denuncia, “pero tardaré años, con suerte 5 o 6 en tener una conclusión y la necesito ya. Cuesta 8.500 euros en Barcelona y no me puedo permitir pagarla, más los gastos de alojamiento, transportes, etc. Dentro de 3 o 5 años tengo que ponerme otra y pedir otro préstamo, toda la vida así”.
José Manuel tiene una incapacidad total “y cobro muy poco dinero. La sanidad pública es para todos los españoles y deberíamos tener los mismos servicios en cualquier punto de España”. Tiene una petición de firmas en Change.org: https://chng.it/Xm62Mh9h.
OPERACIÓN DEL OJO MAL HECHA
La vida de José Manuel Hernández no ha sido fácil desde que nació. Lo hizo en el hospital de San Rafael, en Cádiz, el 24 de diciembre de 1983, cuando se estaba construyendo éste. Su padre trabajaba vendiendo cupones en el Puerta del Mar, pero quiso que su hijo naciera en ese lugar en vez del hacerlo donde él se ganaba la vida.
Cuando se lo entregaron a sus padres iba muy tapado, diciéndoles que lo dejaran así y que ellos se encargarían del niño. Dos días más tarde les dijeron lo que tenía. Al parecer, sus problemas podrían haber estado provocados por unas pastillas que les daban a las embarazadas en aquella época, que ocasionaron las malformaciones.
A todo lo padecido con su pierna derecha se le sumó el problema de la vista. Le implantaron un iris artificial en el ojo izquierdo en el hospital Macarena de Sevilla, donde tampoco lo hicieron bien, ya que se le descolgó una lente y chocaba con la córnea, lo que era peligroso. Quien le operó le aconsejó que fuera a un médico de Alicante, por cuenta del afectado, porque después del desaguisado no se atrevía a operarle de nuevo dos años más tarde de la primera de las intervenciones, tres en total.
José Manuel fue a ver al médico alicantino, catedrático, de los mejores del mundo, que sí se atrevió a operarle, pero le costó 6.000 euros, aparte de los gastos de desplazamiento y permanencia durante quince días en dicha ciudad. Y las revisiones mensuales que tuvo que hacer.
DENUNCA JUDICIAL CONTRA EL SAS
Posteriormente tuvo que acudir a la clínica del doctor Barraquer en Barcelona, para la tensión del ojo, donde le pusieron una válvula, que según el Puerta del Mar, con lo poco que veía no le hacía falta, bastaba con rayos láser. Otros 1.200 euros más, sumándole el desplazamiento y los gastos de dormir y comer. Posteriormente tuvo un desprendimiento de coroides y nueva operación.
Nunca le habían tocado el ojo, pero tras lo realizado en Sevilla ha tenido nueve operaciones. Por todo esto, José Manuel Fernández presentó hace un año una denuncia judicial contra el Servicio Andaluz de Salud por mala praxis, en la que pide que éste le abone los gastos que ha tenido que realizar por esa negligencia, así como una indemnización: “Por culpa de esa mala operación casi no veo. Antes podía ir solo y ahora no. Estos hechos no pueden quedar impunes”.
Está a la espera de que pongan fecha para el juicio. Entre abogado, perito y procurador 6.000 euros más de gasto: “En los últimos años solo pagamos médicos y abogados, pidiendo créditos”.
INFANCIA DIFÍCIL
Reseñar que es un amante de la fotografía, con más de cincuenta cámaras, siendo la más antigua de 1900 y otra de 1905: “Todas funcionan y tengo de todo tipo, pero ya no puedo hacer fotos por lo que he contado”. Hasta los nueve años estuvo estudiando en el colegio Tierno Galván de Cádiz, en la Telegrafía sin Hilos, al lado del estadio Carranza, yendo a continuación al de la ONCE en Sevilla, regresando a los 17 y cursando FP Grado Medio de Administrativo en el Bahía de Cádiz. Entonces tenía un 5% de visión.
En este centro escolar no querían darle clase porque casi no veía, pero acudió a los medios de comunicación denunciándolo y lo aceptaron. Después trabajó en la empresa Eulen de Jerez en la oficina, ejerciendo de recepcionista y telefonista. Tenía 19 años. Continuaría en la ONCE de Algeciras y en la Correduría de Seguros de la citada empresa en la capital hispalense.
EMPRESA PROPIA CON DISCAPACITADOS
También estuvo en Cajasol año y medio de telefonista, en Cádiz vendió cupones y creó su propia empresa de limpieza, mantenimiento y servicios varios, un Centro Especial de Empleo para personas con discapacidad, llegando a tener catorce empleados doce de ellos discapacitados. Pero era 2011, época de crisis, y terminó vendiéndola dos años después a una empresa algecireña “al no poder atenderla ante el rápido crecimiento”.
Además del juicio citado tiene otro pendiente también con el SAS, ya que le han dado la incapacidad total y quiere la absoluta. Está a la espera del fallo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía. En gran parte de esta historia le ha acompañado desde hace quince años su esposa Rocío, que también tiene problemas visuales, concretamente cataratas congénitas, que hace que poco a poco vaya perdiendo la vista. Ha sido su gran apoyo, aparte de los padres de José Manuel, también invidentes.
Es un caso más de los muchos que hay en Andalucía, donde unos funcionarios y profesionales de la medicina no dan el trato que merecen estas personas. Esperemos que la Justicia ponga en su lugar a quienes no actúan como deben. Y que lo haga pronto. Y que el SAS lo mande de nuevo a Barcelona para que pueda tener su prótesis y vivir mejor que ahora.
PACO LÓPEZ
Un ejemplo mas de la ineptitud del SAS, al que no le importa que una persona sufra y gastarse mas dinero con ortopedias andaluzas que no saben que en una que sabe y puedo hacerlo. Patético.
ResponderEliminarJosé Manuel soy una chica amputada yo me hago mis prótesis en una ortopedia de Sevilla y me va bastante bien es ortopedia Dastis por si te puede servir de ayuda un saludo
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