Podemos ofrece su apoyo a la Asociación “Marea Negra” sobre el sector de la seguridad privada

La empresa que presta servicio al Ayuntamiento “no respeta los horarios, trabajan el doble de lo que deben y hay irregularidades en las nóminas entre otras cuestiones”.-

La empresa Mersant Vigilancia es la encargada de la seguridad por parte del Ayuntamiento de Chiclana desde abril de 2018. Desde entonces, según la Asociación Marea Negra, que se encarga de garantizar los derechos laborales de el sector de la seguridad privada, sufren unas condiciones de trabajo bastante mejorables. Así se lo han comunicado a Podemos en un encuentro mantenido con el portavoz Jorge Guerrero.

La citada asociación le mostró sus quejas y reivindicaciones al concejal, que les ofreció su apoyo, asesoría y ayuda a este colectivo “en todo lo posible”. En la reunión se han tratado diversos puntos. Marea Negra explicó las condiciones a las que se ven sometidas las personas que trabajan en el sector en el municipio.

Culpan al Ayuntamiento como “responsable solidario y subsidiario de los trabajadores que le prestan servicio, ya que aunque estén contratados por una empresa privada, es el Consistorio el responsable último de sus condiciones de trabajo”, comentó Guerrero.

El portavoz de Podemos declaró que “los horarios de estas personas no se respetan. Según nos han transmitido, están contratadas por 120 horas y trabajan alrededor de 240, es decir, el doble”.

PAGO DE LAS NÓMINAS TARDE Y CON IRREGULARIDADES

Según Marea Negra “en las nóminas no les ponen las del plus de nocturnidad ni horas extraordinarias, camuflando éstas como prorratas de pagos”.

También trasmitió a la fuerza política que “los pagos se están recibiendo a partir del día 10, y se están haciendo las licitaciones por debajo de convenio, por lo que las nóminas no se pagan de acuerdo a éste”, cobrando una media de entre cuatro y seis euros la hora y en algunos casos, como es el de la Feria de Chiclana “sin transporte ni protección para el sol”. Además, “las vacaciones no se computan a final de año y les piden que las trabajen”.

Guerrero denuncia que “en Mersant Vigilancia no disponen de un comité de empresa real, ya que éste lo constituyó la empresa a su gusto y sin publicidad, y con la protesta posterior de los sindicatos mayoritarios que lo aprobaron”.

Según Marea Negra el comité de empresa está integrado por seis personas cuando son más de 150 las que trabajan allí, por lo que el número debería ser mucho mayor y “compuesto por independientes no afines a la dirección” señaló Guerrero. Por todo esto dicha asociación reclama la figura jurídica de “protección de carácter de autoridad que vele por sus intereses”.

EL EQUIPO DE GOBIERNO SE ENCOGE DE HOMBROS

Agregó Guerrero que “llevan denunciando desde el 2 de octubre de 2018, que es cuando interponen la primera demanda de Inspección de Trabajo, y desde entonces han interpuesto hasta veinticuatro sin resultado”.

Reseñó que “cuando acuden al Ayuntamiento a exponer sus quejas, les piden una sentencia judicial o resolución administrativa que no ha llegado, por lo que ahora mismo se tienen que quedar de brazos cruzados”.

Aseguró el edil que “son un despropósito las condiciones laborales de estas personas que velan por nuestra seguridad durante horas, de pie y muchas veces a la intemperie. Como la circunstancia de una trabajadora que vigila en un parque de la ciudad toda la noche”.

TRATO MACHISTA

Ésta tiene que introducir su vehículo en el parque “para protegerse de las inclemencias y no le dan ni una linterna para poder trabajar. Los servicios cierran a las 21,00 horas, por lo que esta persona carece de un baño que pueda usar para hacer sus necesidades o cambiarse si está con la menstruación”.

El portavoz de Podemos añadió que la empresa Mersant Vigilancia carece de Plan de Igualdad, “por lo que las trabajadoras sufren las consecuencias”, y que según Marea Negra, ante las quejas de esta empleada el jefe de servicio de Mersant le contestó: “Quiere igualdad, pues toma igualdad”.

Jorge Guerrero aseveró que “esto nos da la medida de a qué trato se ven sometidas las personas que trabajan en esta empresa, en la que, además de pésimas condiciones laborales, se cuela el machismo más rancio”. Siguió diciendo que “es el Ayuntamiento el último responsable de las condiciones laborales de estas personas, ya que prestan servicio en esta administración pública, que debe velar por la buenas condiciones de quienes trabajan para ella”.