Siguen los problemas de los desempleados que colaboran con Protección Civil, que ni cobran ni les prestan atención

 

Esto les ha llevado a pedir un donativo en los aparcamientos para poder llevar algo a casa, situación que conocen Benítez Mora y Calvente, responsables del cuerpo.-

 

La Asociación Desempleados por Andalucía, presidida por Manuel Reyes, pidió el mes pasado la dimisión de Rafael Calvente, coordinador de Protección Civil, “por humillar a los desempleados que estamos de colaboradores en los aparcamientos de las playas y en los centros de vacunación de Los Gallos y el Polideportivo Ciudad de Chiclana”. También acusaron del problema a Diego Benítez Mota, responsable de este cuerpo de voluntarios, y al concejal José Manuel Vera. Semanas después la situación ha empeorado en vez de arreglarse, no cobrando estas personas las míseras dietas que les pagan, teóricamente.

 

Según parece, días pasados no había voluntarios de Protección Civil ni estos colaboradores en uno de los lugares donde se está vacunando, Los Gallos, siendo reclamados dichos voluntarios por los propios médicos a Protección Civil, que no hizo caso de esta petición.

 

También nos han informado que coordinadores de Protección Civil se quisieron ir por culpa de Rafael Calvente, que no ha encajado las críticas de estos parados que hemos publicado en varios artículos, por lo que el trato que les dispensa no es el más correcto, provocando su intención de abandonar el cuerpo.

 

Otro problema que tienen es que no han cobrado todavía, ni los que se fueron o echaron ni los que han continuado trabajando todo el mes de julio. El descontrol es tal que hay días que en los aparcamientos no hay nadie de estos voluntarios e incluso se dedican a cobrar un donativo a los automovilistas cuando el año pasado y éste, el Ayuntamiento dijo que serían gratuitos.

 

COBRAR PARA SUBSISTIR

 

Entre que no controlan y que no cobran, estos desempleados se han visto obligados a buscarse las habichuelas en Sancti Petri, donde utilizan un chaleco del Concert Music para que no les digan nada. También cobran en el pinar público de La Barrosa y en el aparcamiento del complejo Bellamar, a la entrada del Novo, así como en otros lugares acondicionados para dejar los coches en las zonas de los hoteles, principalmente por el Riú, Barceló, Torre del Puerco, etc.

 

Esto lo saben Benítez Mota y Calvente, pero no han puesto remedio al asunto, entre otras razones porque no les están pagando lo que el Ayuntamiento se comprometió, 27,50 euros diarios, una cantidad ínfima pero que ni José María Román, alcalde, ni el concejal de Protección Civil, José Manuel Vera, han sido capaces de abonarlas todavía, habiendo dinero para despilfarros de todo tipo, pero no para pagar a estos desempleados, que no tienen qué llevar a sus casas para poder comer. Varios de éstos se han ido aburridos del trato que les dan y de no cobrar.

 

Por otra parte, muchos de los voluntarios de Protección Civil comentan que ellos no pueden hacer o decir nada contra Calvente y que a la  mínima serán expulsados de esta agrupación. También se quejan de que los tiene explotados en sus distintos puestos, sin dejarles tan siquiera beber agua pese a las altas temperaturas, e incluso en alguna ocasión han tenido que ser atendidos por golpes de calor.

 

Esto no solo lo dicen ellos, sino que los familiares también lo han comentado, incluso en las redes sociales. Estos voluntarios agradecen a Reyes “poner cara y voz al problema que están sufriendo, el trato inhumano y dictatorial de este señor, puesto a dedo en su cargo por parte del Ayuntamiento, y que cree que en vez de tener una agrupación de voluntarios, tiene un ejército a sus órdenes” asevera el presidente de Desempleados por Andalucía.

 

EN MANOS DE UN INCOMPETENTE

 

Estos voluntarios “aún no han recibido sus dietas, teniendo en cuenta que una parte de éste es de asociaciones de parados y solo cuenta con ese dinero para sacar a sus familias adelante, teniendo que recurrir a amigos y familiares para pedirles ayuda económica hasta que llegue el ingreso”.

 

Insiste en que “vemos como a este alcalde no le importan nada las personas de su pueblo que más lo necesitan, sin querer mantener un diálogo con nosotros tras la denuncia que hicimos, intentando que la ciudadanía no se entere de lo que verdaderamente ocurre con Protección Civil”.

 

Dice Manuel Reyes que este cuerpo “está en manos de un incompetente e inepto, al que su ego no deja ver que lo que tiene a su mando son voluntarios, tratándolos con falta de respeto y llegando a incluso a amenazarlos con ser expulsados por el simple hecho de opinar o quejarse de las condiciones en las que trabajan”.

 

Continúa diciendo que “si bien deja mucho que desear la gestión de Calvente como coordinador de Protección Civil, peor es la gestión de José María Román, que es quien debería preocuparse por lo que está realizando su subordinado y de las condiciones en las que se tiene al voluntariado”.

 

A ROMÁN SOLO LE INTERESAN LAS FOTOS

 

Según hemos podido saber, una voluntaria de Protección Civil, que lleva varios años, trabajando, ha tenido que solicitar un psicólogo por el trato que recibe. Así mismo, se quejan de tener que empalmar su trabajo diario con el de los conciertos de Sancti Petri, “cuando hay muchas personas que se han quedado en la calle y a las que podrían llamar para hacer alguna de esas labores, en vez de sobrecargar de trabajo a los que están diariamente prestando su servicio en la playa”.

 

Respecto al alcalde, critican que solo se preocupe de Protección Civil para hacerse la foto de cada verano, en vez de preocuparse por cómo los tratan y cómo se encuentran. Tampoco se ha interesado sobre si les dan agua cada día, una simple botella pequeña con la que refrescarse cuando más aprieta el calor, o interesarse por el estado de la voluntaria a la que le dio un golpe de calor.

 

Curiosamente, a esa misma hora estaba el regidor en el puesto de la playa alabando el trabajo de este cuerpo y retratándose para los medios de comunicación, por lo que no la llevaron allí para no chafar el idílico momento, trasladándola a otro lugar. Se da la circunstancia de que la madre de uno de estos voluntarios, viendo acalorado a su hijo, le acercó un refresco de cola y le comentó que no podía beber nada.

 

INSULTOS Y AMENAZAS DE LOS BAÑISTAS

 

Otro de los problemas con los que se encuentran estos voluntarios es que cuando llaman la atención a los bañistas por no respetar las normas, reciben insultos y hasta alguna amenaza de éstos. Encima van solos, nunca acompañados, por lo que la situación es más grave. El año pasado contrataron a 300 personas, pero este verano no llegan a cincuenta, entre otras razones porque muchos de ellos no querían trabajar bajo el mando de Calvente.

 

Le reprocha esa madre que no cuide a los voluntarios como debería, resaltando que “lo que pasa aquí con Protección Civil no pasa en ninguna otra localidad. Es una vergüenza cómo los tienen. Rafael Calvente no está a la altura de ese cargo, algo que no puedo decir de los responsables directos de los voluntarios, que a diferencia de éste, sí se preocupan de ellos e intentan, en lo poco que pueden, facilitarles la labor, pero están a las órdenes de un inepto e incompetente”.

 

Le pide “que haga examen de conciencia, reflexione y haga autocrítica, y de aquí a final del verano mejore las condiciones en las que tiene al voluntariado”. La opinión de esta madre es corroborada por otras y por los voluntarios que cada día tienen que enfrentarse al coordinador.