Una narcolancha se quedó varada esta mañana en el caño de Sancti Petri y tuvo que acudir otra para rescatar a sus ocupantes

Fue a las 9,15 horas y tras intentar devolver la embarcación al agua y no conseguirlo, recogieron a sus ocupantes y se dieron a la fuga.-

Esta mañana, alrededor de las 9,15 horas, las narcolanchas volvieron a hacer su aparición en el caño de Sancti Petri, pocos días después de los luctuosos hechos en los que perecieron cuatro inmigrantes, que fueron arrojados de la lancha en la que habían sido traídos desde el estrecho de Gibraltar, junto con otros veintitrés  más, varios de ellos menores. La presencia de personas en la playa evitaron que la catástrofe fuera mayor, al meterse en el agua para sacarlos de una zona con fuertes corrientes y cuando estaban a punto de morir.

Ocho de ellos tuvieron suerte, pero enfrente, en la de Camposoto, no sucedió lo mismo y cuatro murieron ahogados, mientras que otros tres tuvieron que ser trasladados al Hospital de Puerto Real en grave estado por la hipotermia. El modus  operandi es bestial. Los recogen y los sueltan en el mar para no tener que parar y correr el riesgo de ser detenidos por la Guardia Civil. Si saben o no nadar no les importa, ni que haga frío, estén cansados o se encuentren en una zona de fuertes corrientes. Han cobrado por el trabajo y que se las apañen.

Hoy viernes una narcolancha, posiblemente la misma de hace unos días, quedó varada en el caño, teniendo que acudir otra en su ayuda para rescatar a sus ocupantes. Según ha podido saber PUENTE CHICO,  la segunda, tras intentar devolverla al mar y resultarle imposible, recogieron a sus compañeros de fechorías y se marcharon, dejando la otra embarcación en el caño.

En estos momentos se desconoce qué había en ella, droga o gasoil para las otras lanchas que operan por la zona, ya que el caño y sus afluentes son lugares propicios para cargar los bidones y darse a la fuga, aunque en el río Iro fueron sorprendidos hace unos meses por la Benemérita, requisándoles la mercancía.  

Reseñar que en los últimos meses, verano incluido, por Sancti Petri  han pasado impunemente a plena luz del día. Esta zona es una de las de mayor tráfico de droga, debido a la vigilancia existente en el Campo de Gibraltar. A esta hora de la mañana en Sancti Petri no había efectivos de la Guardia Civil o de otro cuerpo.