Chiclana en “alerta por fachas” (la izquierda se lo tiene que hacer mirar (y II)

FERNANDO PEREA [colaboraciones].-

Ayer les ofrecíamos la primera parte de un artículo de Fernando Perea, periodista y colaborador de PUENTE CHICO, en el que nos analizaba los resultados en Chiclana de las elecciones europeas celebradas el pasado 9 de junio. Hoy ponemos la segunda entrega, tan interesante como la anterior. (http://puentechico1.blogspot.com/2024/08/chiclana-en-alerta-por-fachas-la.html)

POLARIZACIÓN BALANCEADA A LA DERECHA

Analizando bloques en esta ciudad la suma de las opciones de izquierda -con todas sus distintas marcas- en ambas consultas pasa del 54,66% al 36,21%. Estimaremos en este ámbito casi académico como izquierda al PSOE, aunque sea mucho considerar. Es una bajada brutal de casi el 20% en un solo año (18,45% exactamente). Solo el 11% es responsabilidad de los socialistas.

El desencanto con todas las fuerzas políticas es absoluto, pero particularmente con la izquierda. La derecha tradicional pierde también votos, pero en mucha menor medida. Y queda compensada con la nueva marca a la derecha de la ultraderecha.

Todas las fuerzas conservadoras o de derechas pasan del 43,56% en 2023 al 58,92% de los votos en 2024. Supone una subida del 15,36%. Los progresistas pierden la mayoría absoluta del voto y ésta pasa -aumentado incluso un 5%- a los conservadores.

EN ALERTA POR FACHAS

Todavía esto se agudiza en los extremos. La izquierda verdadera -esa que excluye al PSOE, esa que vive mucho en el postureo y lleva lo woke al límite de lo ridículo- sumó en Chiclana el 15,14% el año pasado. En esta última visita a las urnas, solo sacó un 7,91%. Perdió un 7,23%, que es la mitad del apoyo que tenía. Una barbaridad.

¿Y los ultras? Pues al revés. En 2023, Vox obtuvo 10,67%. Hace poco más de un mes la suma de Vox y Salf llegó al 20,22%, es decir un 9,55% más. Traducido: se multiplicó por dos. ¡El doble en un año!

Si esto no configura las condiciones para una Alerta por Fachas en Chiclana, entonces ya no sé que hace falta para desatar una preocupación absoluta. Son 5.124 los que aquí han votado a la ultraderecha.

¿HAY TANTO FACHA EN CHICLANA?

Mucha gente que quiere retroceder en libertades individuales, que no quieren que haya otras personas que recuperen a sus muertos de las cunetas, que le gustaría que se tuviera mayor acceso a las armas de fuego, que quieren seguir manteniendo la barbarie casi medieval de la tauromaquia o que cuestionan nuestra pertenencia a Europa (sí, a esa misma Europa sobre la que no tienen inconveniente -tanto Vox como Se Acabó La Fiesta- en irse allí para cobrar sueldos de eurodiputados).

5.124. ¿Hay tanto facha entre nosotros? Hay quien cree que lo de SALF será un sarampión como fue el partido de Rumasa o el GIL, que pasará con el tiempo a la historia. Pero estamos claramente en una ola neocon-ultraconservadora en el planeta. En ella están (o han pasado recientemente) Argentina, Hungría, El Salvador, Austria, Brasil, Estados Unidos, Polonia, etc... Y porque hace menos de un mes pusieron sus barbas a remojar en la vecina Francia, porque si no...

Es verdad que hay asuntos de los que la ultraderecha ha hecho bandera por mero abandono de su responsabilidad o por cesión ideológica ante el chantaje de quien le permite seguir en la silla. En el primer apartado, el control efectivo de fronteras y el endurecimiento de la ley de extranjería.

En el segundo, todo el desparrame territorial en Cataluña -del que también saca partido Euskadi, a la chita callando- que se vendió como un cambio de opinión que nadie se cree salvo por la razón del soporte en la investidura.

LA COBARDÍA DEL PP AÚPA A LA ULTRADERECHA

Al PP hace poco que le tocó la lotería con la ruptura unilateral de Vox de parte de sus acuerdos. Parte solo, porque aunque no hay ya coaliciones de gobiernos autonómicos siguen juntitos en los ayuntamientos y, además, siguen en sus poltronas todos los presidentes de Vox. Rupturita o rotura con limitación de daños.

Esa cobardía del PP también aúpa a la ultraderecha. Núñez Feijoó no ha elegido mirarse en el espejo de sus homólogos de Alemania o Francia. No ha tenido lo que hay que tener, eso mismo con lo que la derecha francesa se hace una omelette todas las noches y le ponen el cordón sanitario -una vez más- a Marine Le Pen y los suyos.

Luego el equipo de campaña del PP se sigue preguntando por qué los electores no perciben a Feijoó como un hombre de Estado. Así, es imposible. Me tranquiliza -no obstante- que aunque vea en las calles de esta ciudad cierta polarización, no percibo un radicalismo tipo integrista. Pero 5.124 (un 20,22%, recordemos) justifica lanzar una clara Alerta por Fachas.

SI CHICLANA REPRESENTARA ESPAÑA... ¡OJO!

Para terminar, un ejercicio de imaginación -no tan imaginario- que debería poner las orejas de punta a la izquierda -y particularmente- al PSOE. Si España hubiera votado en su totalidad en junio pasado como se hizo en Chiclana de la Frontera, y en lugar de europeas hubiera sido una convocatoria electoral nacional ((unas Generales)…, ¿qué hubiera salido?

Bueno, pues escalando los votos de Chiclana sobre un Parlamento de 350 escaños, el PP hubiera obtenido 133 asientos. La lista más votada, pero lejos de la mayoría absoluta por sí misma.

El PSOE no llegaría ni al centenar de diputados: se quedaría en 99. Un varapalo de narices. Solo en las elecciones de diciembre de 2015 -que terminó con disolución de Las Cortes en seis meses sin poder formar gobierno- y la siguiente de junio de 2016 -que acabó con la investidura de Rajoy con la abstención de casi todo el PSOE- estuvo un poco por debajo: 90 (2015) y 85 (2016). Un registro para dimisión de todos -de conserje pa'rriba- y congreso extraordinario a la carrera. Esa sería la foto socialista con esos 99.

ALTAVOZ PARA ARMAR RUIDO

Vox tendría 43 asientos. Serían diez más que en la actualidad. Si se aviniera a pactar con el PP -cosa que parece complicada ahora, pero cuando vean los maletines ministeriales de cerca verán que todo se facilitará- tendrían la mágica cifra de 176 diputados. Mayoría absoluta por los pelos pero Feijoó presidente y Abascal, su vice.

Los de SALF alcanzarían 28 diputados. Innecesarios para gobernar pero con un altavoz impresionante para armar ruido, para porculizar todo lo que pudieran y -lo peor- hacerse visibles y optar a crecer en la siguiente.

Sumar con 16, se daría una castaña considerable. Vienen de 27 sillones, luego ahora serían más que irrelevantes. Así las cosas, lo más probable es que su jaula de grillos de siglas diferentes se abrirá de par en par... y cada uno a su bola.

VICTORIA APLASTANTE DE LA DERECHA Y ULTRADERECHA

Podemos sacaría 12, lo que mejoraría con mucho las cuatro únicas sillas que les dejó Yolanda Díaz dentro de la última papeleta de Sumar. Pero muy, muy lejos de los 65 de 2015; los 45 de 2016; los 35 de abril de 2019; o los 26 de noviembre de 2019. Otra ronda de irrelevancia. Los escaños restantes se repartirían muy fragmentados en agrupaciones menores, sin interés o fortaleza alguna.

En este ejercicio que haría que la España electoral fuera como Chiclana catapultaría a las fuerzas de derecha y ultraderecha a los 204 escaños, mientras que la izquierda de perfil estatal solo sumaría 127. El clásico dijo aquello de: Los números no se discuten, solo se comprueban. Si quieren hacerlo...

Una vez verifiquen la veracidad de los números, y con ello la plena necesidad de una Alerta por Fachas, podrían darse respuesta a la pregunta: ¿Se lo tiene que hacer mirar la izquierda (en particular, los socialistas) en Chiclana o no?