José María Román, el alcalde “de todos los chiclaneros”, comienza su nueva andadura vetando a PUENTE CHICO

Anunció las concejalías de su equipo de gobierno y fuimos el único medio que no invitaron.-

El alcalde de Chiclana, “de toda Chiclana, los que me han votado y los que no” según dijo en el acto de investidura, José María Román, ha comenzado su nueva andadura al frente del Ayuntamiento vetando a PUENTE CHICO en su primera comparecencia pública ante los medios de comunicación, en la que anunció las concejalías que ostentarán sus once ediles durante los próximos cuatro años.(FOTOS: Román prometiendo cumplir la Constitución, aunque después no respete algunos de sus artículos).

Dice un refrán que la cabra tira al monte y en Chiclana y en el PSOE se cumple esta máxima. Ya saben ustedes que PUENTE CHICO está vetada por los “progresistas” y “demócratas” “socialistas” chiclaneros desde hace 25 años, que son los que llevamos en la calle.

Para este partido y para sus dirigentes, la libertad de expresión, el derecho a la información y el derecho de los ciudadanos a estar informados no tienen la más mínima importancia. Ese diálogo del que se hablaba el pasado sábado en el acto de investidura brilla por su ausencia.

José María Román no se ha caracterizado en los 24 años que lleva en política y sobre todo siendo alcalde, por sus actitudes democráticas, más bien al contrario y con este medio mucho menos. En su primera etapa , cuando sustituyó durante la Feria de San Antonio de 2004 al entonces regidor, Manuel Jiménez Barrios, que dio la espantada y se largó a la Junta de Andalucía, donde permanece once años después, Román levantó el veto municipal a PUENTE CHICO, aunque no lo hizo del partido, donde ostentaba la secretaría local.

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Tampoco ha contado con esta revista para distribuir la publicidad institucional, a la que tenemos el mismo derecho que los demás medios de comunicación, a los que Román entrega ingentes cantidades de dinero, con precios diez veces superiores a los nuestros.

Un ejemplo de ese derroche lo hemos tenido en las decenas de miles de euros que entregó a “Chiclana Televisión”, concretamente a los socialistas Antonio Gautier y Francisco Orrequia, que convirtieron ese medio en un panfleto socialista y que dejaron en la calle a decenas de trabajadores, a los que no pagó sus sueldos y estafó.

Gautier incluso iba en la lista municipal socialista de 2011, quitándolo de ella al enterarse que había sido condenado a 37 meses de cárcel por estafador en el año 2000, que no cumplió por su incapacidad física. Esa incapacidad no le impedía delinquir, pero sí purgar la pena.

Es más, cuando no ha gobernado ha tenido la desfachatez de preguntar en el pleno por lo que el equipo de gobierno pagaba mensualmente a esta revista en publicidad, cuando el PSOE sabe lo que cuesta y también el precio en otros medios, ya que a algunos de éstos les da anualmente alrededor de 200.000 euros. El más barato cobra por una página cuatro veces más que PUENTE CHICO y los más caros diez veces más, pero eso a Román y sus adláteres les da lo mismo. Como hablan bien de él, dinero a manos llenas.

Incluso Román ha tenido la desvergüenza de mentir durante estos tres últimos años sobre lo que recibíamos de publicidad cada mes, asegurando que el PP nos daba 600 euros, sabiendo que es mentira y que podemos demostrar con las facturas.

QUE RECAPACITE

Éste es el alcalde que nos espera en los próximos cuatro años y éste es el partido que tendrá en sus manos Chiclana hasta 2019. Las malas artes y la falta de democracia vuelven al Ayuntamiento. A pesar de ello, mantendremos informados a los chiclaneros, como podamos, de las “medidas mágicas” que Román y el PSOE pondrán en práctica para que Chiclana “vuelva a ser lo que era”.

Por el bien de la ciudad, mejor que no, porque volver a lo que era es volver al cutrerío, al nepotismo, a la prepotencia, al enchufismo, al amiguismo, al sectarismo, al despilfarro y a la ilegalidad, señas de identidad del PSOE en los treinta años que ha llevado las riendas de la localidad como si de su cortijo se tratara.

Esperamos y deseamos que Román recapacite y levante el veto a PUENTE CHICO, porque en el siglo XXI no es de recibo que en democracia un partido que asegura que luchó para que ésta llegara al país, tenga a un medio de comunicación vetado por no estar de acuerdo con lo que éste publica.

Queremos creer que ha sido un lapsus, un error al no estar en su lista de prensa, en la que envía sus notas a todos los medios menos a nosotros desde hace años. Rectifique, alcalde. Dicen que es de sabios. Demuestre que lo es.