La cofradía de Afligidos desfiló con normalidad tras el fiasco de años anteriores por la lluvia

Francisco Vela (Paco “El Chícharo”) tuvo su reconocimiento a la llegada del paso a la iglesia del Nazareno.-

Tras meses de preparación para la salida procesional por parte de las cofradías chiclaneras, el mayor enemigo con el que se encuentran, y contra el que nada pueden hacer es el tiempo. Unas veces porque sopla fuerte el levante y otras por la lluvia, que en más de una ocasión ha obligado a recogerse nada más salir a la calle o regresar antes de la hora prevista como sucedió el pasado año. Este año los astros se portaron bien con Afligidos y ésta pudo desfilar por nuestras calles sin problemas, portado por hermanos de la cofradía.

A las 18,00 horas salía la cruz de guía de la iglesia de San Telmo, donde tiene su sede esta hermandad, por la calle Nuestra Señora de los Remedios. Como es habitual, en esta vía y en las adyacentes cientos de personas no querían perderse el paso de Afligidos, con siete imágenes, con espectaculares tallas y que le convierten en uno de los más bonitos de nuestra Semana Santa.

Tras la salida la comitiva se dirigió a la carrera oficial en la calle La Plaza, continuando por Joaquín Santos, Constitución y Plaza de Jesús Nazareno. Al llegar a la altura de la iglesia de Las Agustinas Recoletas, la puerta principal se abrió y los miembros de la cofradía del Nazareno recibieron al paso de Afligidos.

Éste, a los sones de de la Agrupación de Nuestra Señora de Valme, de (Sevilla) y bajo el mando de sus capataces giraron hacia la puerta de la iglesia, haciendo allí una parada. El capataz dedicó a Francisco Vela (Paco “El Chícharo”), allí presente, y que tiene su salud un poco deteriorada, la levantá que se produjo a continuación.

Tuvo palabras cariñosas para este insigne cofrade, al que catalogó de uno de los más importantes de nuestra Semana de Pasión. Fue el momento emotivo de la tarde-noche.

Tras este acto siguieron por Hormaza, Ramón y Cajal, Gravina, Botica, Santo Cristo (el saetero José Manuel González dedicó una saeta al paso de Afligidos), Bailén, Nuestra Señora de los Santos, Obispo Rancés, Botica, San José y Plaza Mayor, camino de la Iglesia de San Juan Bautista, donde hizo la Estación de Penitencia.

La plaza se encontraba llena de fieles, que quisieron disfrutar de este paso monumental. Tras la salida de la parroquia de San Juan Bautista desfilaron por Padre Añeto, Fierro, Cristóbal Colon, Plazuela de San Carlos, Huerta Chica, Plaza España, La Fuente, Vega, Padre Caro, Nuestra Señora de los Remedios, y hacia su templo alrededor de la medianoche.