Grandes colas de tráfico y atascos a todas horas por el casco urbano

El paso del tranvía y el corte de la Alameda agravan el problema de circulación, empeorando con la entrada y salida del trabajo y los colegios.-

Hasta hace poco en Chiclana teníamos atascos a horas concretas del día, por la mañana a la hora de entrar al trabajo y a los colegios o al salir de éstos. Pero había muchos momentos del día y numerosos lugares donde esas concentraciones de vehículos no se veían.

Pero con la llegada del tranvía y su paso por la avenida de Reyes Católicos, Puente Grande, el Pájaro, Mendizábal y Alameda Solano, todo el centro de la ciudad, ya no hay hora en la que no tengamos colas. La Avenida del Comercio, en El Torno, es otra calle insufrible, con atascos a las 14,00 horas principalmente.

A estas calles se le han unido Ancha, Sor Ángela de la Cruz, Virgen del Carmen, Rejas Verdes y otras de la zona. Para ir del Pabellón de Deportes al Pájaro hay muchos momentos que tardas entre veinte y treinta minutos, lo mismo que del Pájaro a Urbisur. La avenida de los Descubrimientos es otra vía con masificación de coches en dirección a la Venta Agustín a cualquier hora, sobre todo por la mañana. Y en dirección al centro también, pero en momentos determinados.

Avenida de la Diputación, Carboneros o Doctor Pedro Vélez tampoco se quedan atrás. El corte de la Alameda del Río por las obras lo ha empeorado mucho más. Ahora, los que vienen de Pelagatos o quieren ir hacia Santa Ana o el centro, es una odisea lo que tienen que pasar. La Cuesta del Matadero es un suplicio y en las horas punta insufrible, tanto para entrar como para salir del centro.

CAOS EN EL CENTRO

Llegar al Santo Cristo cuesta lo suyo y circular por Bailén y Hormaza igual, pero si coincide con la salida de los alumnos de La Salle entonces se convierte en un caos absoluto, ya que a los cientos de coches que circulan por allí hay que unirles los de los padres que van a recoger a los hijos, aparcando en doble o triple fila con total descaro y provocando que la cola sea aún mayor. Y en Santa Ana con los alumnos de Los Remedios y el Poeta García Gutiérrez.

La carretera de Fuente Amarga es otra que tal baila. Subiendo o bajando. Y Agustín Blázquez hacia la carretera de La Barrosa ni les cuento. Puede estar veinte minutos o más en cruzarla a las 9 o 10 de la mañana o a la salida del colegio. Y los que salen del centro por Pepín Jiménez igual.

Una vez llegados a la carretera de La Barrosa, otro buen montón de minutos para recorrer cien metros hasta la rotonda Lorenzo Delgado. Si giras hacia la izquierda te toca esperar lo suyo, porque entre los que van al centro por la avenida de la Diputación y los que vienen de Carboneros, puede darnos las tantas.

Somos la ciudad de los atascos y el PSOE nos quiere poner más semáforos y rotondas para una circulación más calmada, cuando lo que tenemos es una circulación parada. Y en todos estos recorridos no se ve un policía ni por casualidad.