El Ying y el YAng [colaboración]
Fumanchú, el CHINAclero disconforme [colaborador].-
Algunas veces da que pensar que en mi pueblo, al igual que en mi país, existe una estructura política sin precedente actualmente en el mundo. Pero yo diría más, ni siquiera en toda la historia de la humanidad.
Yo desafiaría a cualquier periodista o historiador que me haga una comparativa, una similitud o un pequeño parecido de lo que aquí está pasando.
La verdad es que yo presiento que existe una estructura política tan bien montada y tan asentada que es imposible ya desmontarla ni desmantelarla sin que se lie la gorda. Lo más lamentable y lo más penoso es que nadie mira adelante, el negocio es muy fácil y sencillo, se mira hacia un lado o hacia otro pero no hacia los dos a la vez, se mira hacia arriba o hacia abajo, hacia detrás incluso, también se puede decir que no se mira, pero nadie es capaz de decir que miran alguna vez hacia delante.
La izquierda, la mejor izquierda, con su discursito de los curas o de los fachas en los momentos críticos y ese argumento tan desastroso de querernos hacer ver todo lo malo de gente malvada perversa y bellaca del franquismo que ahora deberían de tener 90 años. Esa izquierda que no admite ni admitirá nunca ni la más mínima pizca positiva hacia cualquier persona que no tenga el carné en la boca y que siguen diciendo y proclamando que los sanguinarios fachas del franquismo están aún con nosotros conviviendo rebujaos. Y es más, comen con nosotros y se acuestan con nuestras hijas.
Esta izquierda que también mira hacia todos lados menos hacia sí misma. Y lo más penoso es que basa toda su existencia a ese discursito de la ignorancia analfabeta, discursito del miedo y la media verdad, discursito de la gran pesadilla y el gran tormento, la verdad sea dicha, la fomentación de una juventud omisa en estos temas, el discursito de somos los buenos mientras seamos los pobres. Pero no, ni puta idea de lo que hay hacer para aparentar ser pobres.
Eso por un lao.
Y esa derecha que no va a dejar nunca de ser ramplona, que no respeta ni su fecha de caducidad, agria, incomprensible en nuestros días. Esa derecha de procesión y brillantina, pija, que no gastan ni bromas, que nunca se arrimaron ni se arrimará a la gente llana, a lo simple, a lo sencillo, esa derecha clasicista que constantemente parece que se avergüenza de ser lo que es y de ser quienes son. Esa derecha con muchísima vergüenza por fuera y muy poquísima por dentro. Esa derecha excusada en Dios padre todopoderoso, creador del cielo y la tierra, que se creen que está de su parte, que como no puede decir que se arrima a la izquierda pues dice que es centro derecha.
Esa derecha que es más, no se puede decir ni de que, al menos, tenga discurso filosófico porque es que no lo tiene ni lo ha tenido nunca, ni filosófico ni de ningún tipo. Un discurso que se basa plenamente en la incapacidad, inoperancia y sinvergonzonerío de la izquierda. Y que cada vez que ha gobernado es por lo harto que nos hemos quedao de los gobiernos de izquierda. Y para colmo buscan el buen ejemplo fuera de nuestras fronteras porque no lo encuentran ni en ellos mismos.
Dos pilares, dos postes que sostienen nuestra convivencia, tan perfectamente compenetrados entre sí que es como el Ying y el Yang que están por encima de todo, que todo Dios tiene por donde callar. “El que se mueva no sale en la foto”, dijo uno una vez. Que te mueves tú, pues mañana me muevo yo. Que te toca ahora a ti, pues mañana me tocará a mí. Que te trincaron, ¡maldito juez de derechas!”. Que lo cogieron con las manos en la maza, “¡Maldito juez progre”.
O sea, el sinvergüenza se puede cobijar en cualquier bando porque el sistema es tremendamente perfecto para él, un paraíso para el caradura. El imputado no está detenido, el detenido no es imputado, el sospechoso es presunto, el presunto es el supuesto. Palabritas menudas que adornan discursitos en los congresos que animan a que levanten las manos y muevan muchas banderitas rojas o azules, paguen y subvencionen, capuchones, bocadillos y autobuses e intenten hacer ver en una imagen televisiva que una innumerable masa os apoya y os sostienen a ambos como la doctrina y la contra doctrina. Den cifras que aquí estamos nosotros para creérnoslas.
Tantos unos como otros. Que treinta añitos de democracia, que treinta años de libertad nos han dado los dos, que treinta años se han llevado. Y ahora de postre la puta crisis, la guinda de la tarta que hasta en eso tienen los dos suficientes argumentos para culparse unos a otros.
Nunca entendí esa palabrita que le pusieron a la “Coca-Cola light”; ahora sí entiendo ese significado que es “light”. Lo que habéis sido siempre, unos gobiernos multinacionalitas para multinacionales de diseño, gobiernos “light” repartidos por toda la geografía de España, con menos fuerza que un muelle de guita. Al servicio del mejor postor extranjero, al servicio de los anuncios de la televisión.
Estamos apañaos si esto va a ser el siglo 21.
Algunas veces da que pensar que en mi pueblo, al igual que en mi país, existe una estructura política sin precedente actualmente en el mundo. Pero yo diría más, ni siquiera en toda la historia de la humanidad.
Yo desafiaría a cualquier periodista o historiador que me haga una comparativa, una similitud o un pequeño parecido de lo que aquí está pasando.
La verdad es que yo presiento que existe una estructura política tan bien montada y tan asentada que es imposible ya desmontarla ni desmantelarla sin que se lie la gorda. Lo más lamentable y lo más penoso es que nadie mira adelante, el negocio es muy fácil y sencillo, se mira hacia un lado o hacia otro pero no hacia los dos a la vez, se mira hacia arriba o hacia abajo, hacia detrás incluso, también se puede decir que no se mira, pero nadie es capaz de decir que miran alguna vez hacia delante.
La izquierda, la mejor izquierda, con su discursito de los curas o de los fachas en los momentos críticos y ese argumento tan desastroso de querernos hacer ver todo lo malo de gente malvada perversa y bellaca del franquismo que ahora deberían de tener 90 años. Esa izquierda que no admite ni admitirá nunca ni la más mínima pizca positiva hacia cualquier persona que no tenga el carné en la boca y que siguen diciendo y proclamando que los sanguinarios fachas del franquismo están aún con nosotros conviviendo rebujaos. Y es más, comen con nosotros y se acuestan con nuestras hijas.
Esta izquierda que también mira hacia todos lados menos hacia sí misma. Y lo más penoso es que basa toda su existencia a ese discursito de la ignorancia analfabeta, discursito del miedo y la media verdad, discursito de la gran pesadilla y el gran tormento, la verdad sea dicha, la fomentación de una juventud omisa en estos temas, el discursito de somos los buenos mientras seamos los pobres. Pero no, ni puta idea de lo que hay hacer para aparentar ser pobres.
Eso por un lao.
Y esa derecha que no va a dejar nunca de ser ramplona, que no respeta ni su fecha de caducidad, agria, incomprensible en nuestros días. Esa derecha de procesión y brillantina, pija, que no gastan ni bromas, que nunca se arrimaron ni se arrimará a la gente llana, a lo simple, a lo sencillo, esa derecha clasicista que constantemente parece que se avergüenza de ser lo que es y de ser quienes son. Esa derecha con muchísima vergüenza por fuera y muy poquísima por dentro. Esa derecha excusada en Dios padre todopoderoso, creador del cielo y la tierra, que se creen que está de su parte, que como no puede decir que se arrima a la izquierda pues dice que es centro derecha.
Esa derecha que es más, no se puede decir ni de que, al menos, tenga discurso filosófico porque es que no lo tiene ni lo ha tenido nunca, ni filosófico ni de ningún tipo. Un discurso que se basa plenamente en la incapacidad, inoperancia y sinvergonzonerío de la izquierda. Y que cada vez que ha gobernado es por lo harto que nos hemos quedao de los gobiernos de izquierda. Y para colmo buscan el buen ejemplo fuera de nuestras fronteras porque no lo encuentran ni en ellos mismos.
Dos pilares, dos postes que sostienen nuestra convivencia, tan perfectamente compenetrados entre sí que es como el Ying y el Yang que están por encima de todo, que todo Dios tiene por donde callar. “El que se mueva no sale en la foto”, dijo uno una vez. Que te mueves tú, pues mañana me muevo yo. Que te toca ahora a ti, pues mañana me tocará a mí. Que te trincaron, ¡maldito juez de derechas!”. Que lo cogieron con las manos en la maza, “¡Maldito juez progre”.
O sea, el sinvergüenza se puede cobijar en cualquier bando porque el sistema es tremendamente perfecto para él, un paraíso para el caradura. El imputado no está detenido, el detenido no es imputado, el sospechoso es presunto, el presunto es el supuesto. Palabritas menudas que adornan discursitos en los congresos que animan a que levanten las manos y muevan muchas banderitas rojas o azules, paguen y subvencionen, capuchones, bocadillos y autobuses e intenten hacer ver en una imagen televisiva que una innumerable masa os apoya y os sostienen a ambos como la doctrina y la contra doctrina. Den cifras que aquí estamos nosotros para creérnoslas.
Tantos unos como otros. Que treinta añitos de democracia, que treinta años de libertad nos han dado los dos, que treinta años se han llevado. Y ahora de postre la puta crisis, la guinda de la tarta que hasta en eso tienen los dos suficientes argumentos para culparse unos a otros.
Nunca entendí esa palabrita que le pusieron a la “Coca-Cola light”; ahora sí entiendo ese significado que es “light”. Lo que habéis sido siempre, unos gobiernos multinacionalitas para multinacionales de diseño, gobiernos “light” repartidos por toda la geografía de España, con menos fuerza que un muelle de guita. Al servicio del mejor postor extranjero, al servicio de los anuncios de la televisión.
Estamos apañaos si esto va a ser el siglo 21.
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ResponderEliminarPOLITICOS, cualquier dia no podreis andar tranquilo por la calle, ese dia llegara porque una guerra se formara y los politicos que nos habeies arruinado la vida a los pobres que hemos trabajado como negro del siglo XVIII.
ResponderEliminarQue verguenza de pais donde esta blas infante para recordarnos que nos levantemos donde esta el blas infante del siglo XXI que verguenza de eso se aprovechan los politicos de un pueblo cobarde . Ni con franco habian tantos cobarde como hoy en dia.
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ResponderEliminarEr probe Migué
ResponderEliminarPues mira Chinito: Puestos a pedir quedate con tu Ying Yang, que yo pediré un Ying Tonic.
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ResponderEliminaryo ya no tengo claro lo que es de izquierdas ni de derechas por muchísimos millones de cientos de euros que hayan invertido en propaganda.Que si el acoso a la iglesia y el feminismo y los institutos y los observatorios de la mujer, pues sí, pero poco más.Bueno sí tb dividir España.Que la izquierda esa europea cúal es su modelo? el de Bolivia, el cubano? hambre para todos y mucha demagogia y populismo?Que si nos llevan al peor escenario posible en las peores condiciones imaginables, eso ya es grave porque les gustan más los cargos que la responsabilidades, pero el proble que tienen es mucho peor.Es que no se les ocurre nada como alternativa al neoliberalismo y andan tirando desde hace décadas bande´´andose como pueden.Es que es de izquierdas dejar a la gente sin casa y sin trabajo.Porque a veces parece que no se pudiera hacer peor ni queriendo
ResponderEliminares que Antonio Banderas se ha hecho de derechas y yo no me he enterado? además no entiendo lo de ramplona, es más yo diría que desde hace algún tiempo los pijos son ellos o lo parecen o lo quieren parecer y los de derecha van de hippis con las melenas, las chanclas de cuero y las pulseritas, son las de izquierda las que les ha dado por comprarse chaquetas y se sienten o se muestran como si fueran altas ejecutivas ,y ellos camisas y trajes y corbatas.¡lo que gastan los y las del psoe en ropa! qué obsesión.pero es que no veis a la alcaldesa de Sanlúcar?Igualito que las del pp que las hay como la de Cospedal que saca vestidos que la verdad yo no sé de dónde los saca.A quien les ha dado por las marcas y la ropa es a ellos y no lo pueden disimular, es así cómo disfrutan, comprando muchas viviendas, viajes y hoteles de lujo y ropa cara.Y lo de la iglesia... la de Cospedal era madre soltera, Soraya está casa por lo civil, anda que no se celebran bodas en Madrid del mismo sexo de familias superconocidas del pp... vale ya de tantos estereo tipos
ResponderEliminarlos estereotipos existen
ResponderEliminares mas yo diria que Toda españa esta esterootipada.
hay tipos de todas las clases y hay de todas clases de tipos.
Aqui no se sarva ni er gato.
¿ves Fumanchú ´como no estamos hablando de estereotipos? no se trata de tener derecho, se trata de ser tan tonto como para sentirse mejor por gastarse tantos euros en un polito para sentirse mejor y distinguido de los que no lo llevan!! se trata que ellos se empeñan em esparcir que no somos iguales y que unas personas valen más que otras
ResponderEliminaryo puediera entender que un trabajador se haga autónomo, se convierta en un empresario y acabe juntando 2 millones de euros y se compre un chalet de 2 millones de euros en una playa paradisiaca en santo domingo o donde le dé la gana, pero todavía no entiendo cómo Rubalcaba y para qué quiere con la vida que lleva, su ideología, y sin hijos para qué los quiere.Es mentira que se trate de derechos, se trta que para qué quiere Carmen Chacón ser un día nacionalista y al siguiente convertirse en una clasista que su abuelo era el mecánico del pueblo!es que sehan puesto de acuerdo tos los tontos y tontas de este país pa tomarnos el pelo? que enseñe el chalet de derechasy se deje de cuentos!
ResponderEliminarpresiento que vivo en un gigantesco tanque de gasolina de 50.000 oxtanos
ResponderEliminarpresiento que ya solo me falta una chispita